EL MUNDO 11/01/15
· La ANC iniciará mañana una «campaña de movilizaciones» para exigir un acuerdo
Las discrepancias aún no resueltas entre CiU y ERC que impiden alcanzar un acuerdo sobre cómo encauzar el proceso soberanista se ganaron el rechazo del resto de fuerzas políticas y de la sociedad civil, representada por la Asamblea Nacional Catalana (ANC). La líder de esta entidad, Carme Forcadell, desveló que convocarán una «campaña de movilizaciones» a partir de mañana para exigir que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, y el de ERC, Oriol Junqueras, alcancen un acuerdo que permita celebrar elecciones con carácter plebiscitario antes de los comicios municipales de mayo.
«En estos momentos necesitamos un mandato democrático claro», remarcó Forcadell, y avanzó que de no alcanzarse el consenso político, la ANC celebrará una consulta con sus socios, colaboradores y simpatizantes sobre cómo proceder. La entidad considera que el proceso participativo del 9-N fue la primera vuelta de unas elecciones que han de tener la segunda en un adelanto electoral.
Pero justamente éste es uno de los escollos, el más importante, que impide que Mas y Junqueras lleguen a un acuerdo, pues ayer la secretaria general de los republicanos, Marta Rovira, admitía que su partido cederá en cuanto a la incorporación de independientes en las listas. Rovira afirmó, en una entrevista a Catalunya Informació, que los independientes «no serán un escollo» para alcanzar un acuerdo, puesto que los republicanos darán preferencia a Mas para que pueda configurar la «mejor lista» transversal «posible» con los independientes que deseen formar parte de esta candidatura mientras que su formación, posteriormente, confeccionará su propia lista con «personas de su entorno».
Rovira defendió el derecho de ERC a no «desaprovechar» el «talento» de personas relevantes de la sociedad civil del ámbito de la socialdemocracia y que, una vez Mas haya cerrado su lista, puedan querer incorporarse a la lista de ERC o a la opción independentista de la CUP.
Pero Rovira insistió en la celebración de unos comicios antes de las elecciones municipales y, por ello, exigió que se clarifique «qué fórmula electoral» se va a adoptar para «ponerse a trabajar», ya que dejar unas plebiscitarias para el próximo otoño permitiría «que sobre la mesa aparezcan otros debates de ámbito estatal que planteen escenarios rupturistas», concretó la líder republicana. Además, lo considera «urgente» dado que «la legislatura está agotada y Cataluña no tiene ni recursos ni competencias para ayudar a nuestros ciudadanos». Una vez desencallado el debate sobre las fórmulas electorales para presentarse a los comicios autonómicos, desde ERC se cree que será ya posible entrar a debatir sobre la hoja de ruta que debe llevar a una Cataluña independiente.
La situación de ingobernabilidad que se está generando es la razón por la cual se vertieron críticas desde los partidos de la oposición. La líder del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, calificó de «espectáculo ridículo» las negociaciones para la convocatoria de elecciones anticipadas y pidió la dimisión del presidente de la Generalitat, Artur Mas, a quien acusó de tener «vicios antidemocráticos» y de querer estar «por encima de los partidos políticos, no permitiendo que éstos tengan libertad para hacer sus propias listas». Por su parte, la secretaria de organización del PSC, Assumpta Escarp, se preguntó: «¿Cómo quieren gobernar juntos, cómo quieren llevar a Cataluña a un Estado independiente si son incapaces de ponerse de acuerdo ni en un Presupuesto, ni en cómo se deben producir las elecciones al Parlamento, ni en cómo presentarse?». Advirtió de que «esta ceremonia de confusión no ayuda a este Gobierno de concentración».