ABC – 23/06/15
· Bajo el efecto Podemos, nombra como portavoz a una sindicalista.
· Homs ya no será vocero: El presidente catalán quita la portavocía al polémico Homs, que se hará cargo de la campaña del 27-S.
Cambios con perfil bajo, pero suficientes para que Artur Mas pueda jactarse de que, por fin, ya tiene un gobierno independentista «cohesionado cien por ciento». Tras la marcha de los tres consejeros de UDC, consecuencia de la ruptura de la federación de CiU, el presidente catalán afronta los tres meses que quedan para las elecciones autonómicas del 27 de septiembre con un Ejecutivo monocolor sin fisuras en materia secesionista.
De los cuatro consejeros que ayer tomaron posesión del cargo, tres son debutantes y ocuparán las consejerías de Interior ( Jordi Jané), Agricultura ( Jordi Ciuraneta) y Gobernación (Meritxell Borràs). Por contra, Neus Munté ya formaba parte del Gobierno de Mas como consejera de Bienestar y Familia, pero ahora se convierte en la número dos del Ejecutivo al sustituir a Joana Ortega (Unió) como vicepresidenta. Además, asumirá el cargo de portavoz de la Generalitat ejercido hasta ahora por Francesc Homs, que sigue como consejero de Presidencia. El polémico Homs, que hacía gala de un discurso de abierta confrontación con las instituciones del Estado –llegó a ser desautorizado por el propio Mas–, se centrará ahora en preparar la campaña electoral de Convergència para el 27-S. El dirigente nacionalista no solo se ahorra los sobresaltos que provocaba su hombre de confianza, sino que gracias a Munté pone un acento social a un Ejecutivo amenzado por el auge de Podemos, tal como él mismo reconoció el sábado en una conferencia en Molins de Rei (Barcelona).
«Quiero mi patria libre»
La nueva mujer fuerte del Gobierno autonómico fue dirigente de UGT y durante los tres años que ha estado al frente de la Consejería de Bienestar y Familia ha tenido que lidiar con los recortes que Mas ha aplicado en políticas sociales. «Asumo mis nuevas responsabilidades con responsabilidad, humildad y para seguir trabajando por la justicia social y la plenitud nacional», escribió ayer Munté en la red social Twitter, donde la nueva vicepresidenta incluye en su perfil «Mi patria la quiero libre». Los cuatro consejeros, que tienen en común haber sido miembros de las juventudes convergentes, tomaron posesión de su cargo con una genérica promesa de cumplir la ley, sin referencia ni a la Constitución ni al Estatuto, y con «lealtad al presidente de Cataluña».
«El nuevo Gobierno está altamente cohesionado en su último objetivo nacional: que el pueblo de Cataluña se pueda pronunciar de manera definitiva sobre la constitución de un Estado para Cataluña», dijo Mas en un discurso de bienvenida, más propio de un candidato que de un cargo institucional. «Quiero dejar muy claro que para nosotros el “sí-sí” (“sí”al estado propio y “sí” a la independencia) no es trabajar para una parte del país, sino para todo el país», dijo el presidente autonómico, quien deseó «suerte y aciertos» a los flamantes cargos. Su objetivo, dijo, es «que la gente se pueda pronunciar sobre esto, es nuestro norte, y queremos dar la voz y el voto a la gente». Recordó que «ya lo intentamos y lo logramos el pasado 9-N (en referencia al simulacro de consulta sobre la independencia) y ahora lo queremos hacer con todas las consecuencias. Y no hemos tenido otra forma de hacerlo que a través de una convocatoria electoral».
ABC – 23/06/15