ABC 18/01/14
· El presidente de la Generalitat recibió un aluvión de criticas e intentó evitar la foto con el presidente de Lombardía, favorable a la secesión de Cataluña
Artur Mas recibió ayer a escondidas a su único aliado europeo en su plan independentista. Se trata del líder de la xenófoba Liga Norte, Roberto Maroni, quien sí hizo ostentación de su periplo barcelonés y de su apoyo al proceso secesionista catalán. Maroni, presidente de la región italiana de Lombardía, celebró la pasada Diada del 11 de septiembre vistiendo una camiseta con la bandera independentista como «solidaridad con los catalanes que exigen el referéndum sobre la independencia». Pese al secretismo del encuentro, al que también asistió el cónsul general de Italia, Stefano Nicoletti, el presidente de la Generalitat no se libró de las críticas.
«Visita privada» La Generalitat alega que el encuentro fue «privado» y a petición del propio dirigente italiano
Las declaraciones racistas de dirigentes de la Liga Norte —el senador Roberto Calderoli comparó a la ministra italiana de la Integración, Cécile Kyenge, originaria del Congo, con un orangután el pasado verano— no son precisamente una buena tarjeta de presentación para Mas, cuya agenda oficial no incluía el encuentro con Maroni. No hubo convocatoria a los medios, pero sí un comunicado justificando el encuentro. En el mismo se explica que Mas recibió a Maroni «en visita privada» y a petición del propio dirigente italiano. Recuerda la Generalitat que Maroni preside la asociación Cuatro Motores por Europa (Ródano-Alpes, Lombardía, Cataluña y Baden-Württemberg), de la que el Gobierno catalán fue impulsor. Sin embargo, el líder nacionalista no pudo evitar compartir con el italiano su proyecto secesionista y su convencimiento —desmentido por varios mandatarios europeos— de que «independientemente de lo que suceda con su estatus político», Cataluña «continuará en la zona euro» porque «Cataluña es un país orgulloso de ser europeo».
Roberto Maroni fue mucho más expansivo y posó ante las cámaras para explicar el motivo de su estancia en la Ciudad Condal, invitado por la Cámara de Comercio Italiana de Barcelona. También ofreció una rueda de prensa en el Hotel Majestic, cuartel central de CiU en las noches electorales. El dirigente de la Liga Norte, que el jueves asistió a un acto en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), aludió a las grandes similitudes entre Cataluña y Lombardía y explicó que su objetivo era invitar a Cataluña a la Expo de Milán de 2015, que tiene como lema «Alimentar el mundo, energías para la vida». Maroni se vio también con el consejero catalán de Agricultura, Josep Maria Pelegrí, en una reunión «institucional» en la que hablaron de «temas agrícolas comunes».
Los reproches al «president» por su encuentro con Maroni se sucedieron a lo largo de la jornada. La secretaria de política europea del PSC, Esther Niubó, consideró «vergonzoso» que el presidente catalán se vea con un dirigente político «que ha realizado declaraciones y actuaciones racistas en su país y que mantiene relaciones y vínculos con la extrema derecha europea».
«Indigno e hipócrita»
«Es indigno e hipócrita que Artur Mas hable tanto de democracia a la vez que secunda políticos con comportamientos tan antidemócratas», añadió, para acusar luego a Roberto Maroni de promover la independencia de su región con planteamientos xenófobos e iniciativas que van contra los Derechos Humanos.
«Se debe evitar por todos los medios facilitar el trabajo a aquellos que malintencionadamente quieren situar Cataluña en el bando de movimientos xenófobos y populistas que hoy están en expansión en Europa», dijo el cabeza de lista de ICV a las elecciones europeas, Ernest Urtasun, mientras que desde SOS Racismo se avisó de que el dirigente de la Liga Norte se caracteriza por «un discurso racista y fascista» y por «promover diferentes acciones de violencia directa contra personas de origen inmigrante». Por su parte, el líder de CiU en el Congreso, Josep Duran Lleida, defendió que su papel institucional como presidente de la Generalitat obliga a Mas a recibir a Maroni porque representa democráticamente a los ciudadanos de
Lombardía. Sin embargo, en un apunte en su perfil de Twitter precisó que la Liga Norte «no tiene nada que ver» con CiU, ni la Padania con Cataluña.
El presidente de la también xenófoba Plataforma por Cataluña, Josep Anglada, sí aplaudió el encuentro entre Maroni y Mas, y criticó «la falta de respeto y de calidad democrática de asociaciones subvencionadas y sin ninguna representación popular hacia quien ha sido elegido presidente de Lombardía con millones de votos». Para Anglada «es la tónica de siempre de estos inquisidores que tienen como normal la amenaza, el insulto y la provocación». Afirmó que «con la Liga, así como con otros partidos europeos, nos une la común lucha contra la inmigración y la islamización de nuestro continente», añadiendo que Maroni es el presidente «de una de las regiones más prósperas y vanguardistas de la UE».