EL CORREO, 31/7/2011
Alrededor de trescientas personas participaron ayer en la localidad mallorquina de Calvià en el homenaje a los guardias civiles Diego Salvà Lezaun y Carlos Saenz de Tejada, asesinados por ETA el 30 de julio de 2009. La explosión de la bomba que acabó con su vida ha sido el último atentado mortal cometido por la banda en territorio español en los últimos dos años.
Durante el acto de ayer, que comenzó a las 13.00 horas con el izado de la bandera española, las autoridades baleares y locales y los compañeros de la Guardia Civil realizaron dos ofrendas florales en su memoria.
«Que aquel atentado sea el último y nadie suceda a Diego y Carlos en esta infame lista», sostuvo el presidente del ‘Govern’ balear, José Ramón Bauzá. El dirigente popular manifestó que espera que cada 30 de julio sea recordado como el último día en que ETA actúo, y que la banda sea «pronto pasado, sin confusiones ni juegos de palabras» porque «su único futuro es claro».
Antonio Salvà, padre de Diego, señaló que tras la muerte de su hijo ha sido varias veces víctima del terrorismo. Por ejemplo, como cuando los jueces de la Audiencia Nacional «excarcelan a etarras sin notificación o por equivocación». Por este motivo, reclamó que los actos de terrorismo cometidos en Europa sean considerados delitos europeos y juzgados en un tribunal especial comunitario con el cumplimiento total de las condenas en cualquier parte de la UE. «Así evitaríamos el cachondeo de la Audiencia, de la manipulación política y estaríamos más protegidos», recalcó el padre de Diego Salvà.
Por su parte, el delegado del Gobierno en Baleares, Ramón Socias, agradeció el trabajo de la Guardia Civil, que no se «amilanó» ante el atentado que costó la vida de sus dos compañeros, y señaló que desde las instituciones se seguirá trabajando para garantizar que el cuerpo armado pueda hacer su trabajo con seguridad.
También acudió al homenaje el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti. El dirigente popular afirmó que «se puede y se debe derrotar a ETA», y para conseguirlo «ningún gobierno» debe volver a «picar en el anzuelo de una negociación política».
Exigencias
«Hay que ser firmes y exigentes» porque la banda terrorista «debe perder toda esperanza de alcanzar objetivos políticos». «Darle algo de lo que pretenden sería rematar a Diego y a Carlos y darle motivos para que siga extorsionando para conseguir más», precisó Basagoiti.
Tras las intervenciones, el presidente del ‘Govern’ balear, el alcalde de Calvià, Manuel Onieva, y el padre de Diego Salvá colocaron una ofrenda floral y alrededor de un centenar de miembros de la Guardia Civil cantaron el himno del instituto armado.