EL MUNDO 07/03/14
· Ante las dudas que tienen los inversores internacionales sobre la amenaza independentista en Cataluña, Moody’s publicó ayer un informe en el que la agencia de rating concluye que el proceso de independencia es más «ruidoso» que real.
La agencia estadounidense, que el pasado mes decidió por sorpresa subir la nota de España y varias comunidades autónomas, entre ellas Cataluña, difundió este jueves un informe en el que aclaró que llevó a cabo esa subida de rating porque en este momento descarta que la amenaza independentista triunfe, dado que responde más al ruido mediático que a un plan político viable y real.
«Aunque Moody’s espera que el tema de la independencia de Cataluña gane protagonismo en los próximos meses, la agencia de rating ve la independencia de Cataluña como un evento poco probable en los próximos dos o tres años», aseguró ayer en un comunicado firmado en Londres.
Los observadores de Moody’s dan por seguro que la discusión política subirá de tono en los próximos meses por las posiciones opuestas que matienen el Gobierno central y la Generalitat sobre la consulta soberanista, pero concluyen que esas disputas probablemente acabarán en una renegociación del actual sistema de financiación autonómica con un nuevo modelo «más beneficioso» para Cataluña.
Según recordó ayer Moody’s en el informe que envió a los inversores que tienen contratados sus servicios, «sólo un tercio de la población catalana está fuertemente a favor de la independencia».
Los analistas de la agencia americana han tenido muy en cuenta en la elaboración de ese documento sobre las aspiraciones del independentismo que «las autoridades políticas catalanas han dejado claro que sólo procederán con mecanismos legales, y que permanecer en la zona euro es un elemento político clave».
Con esa premisa, el informe de Moody’s afirma que, en opinión de sus expertos, «estos objetivos podrían ser difíciles de reconciliar con la independencia». «Es más, ningún plan práctico para la independencia está en marcha en este momento», remacha la agencia.
Lo que sí da por seguro Moody’s es que el Gobierno de Artur Mas «probablemente convocará elecciones anticipadas» si el Ejecutivo español declara inconstitucional la petición de la Generalitat de celebrar un referéndum o una consulta a los ciudadanos catalanes, como ocurrirá –según ha asegurado el Gobierno central– en repetidas ocasiones.
En ese escenario electoral, el tono político de Mas y sus socios de Gobierno podría endurecerse, pero hasta dónde llegará la amenaza dependerá en buena medida de cómo evolucione la negociación del sistema de financiación autonómico que el Gobierno de Mariano Rajoy mantendrá con las comunidades autónomas.
«Cataluña se ha quejado desde hace tiempo de que con el actual sistema [de financiación], está en desventaja comparado con otras regiones», afirma Moody’s. La agencia da por hecho que este asunto se negociará y no duda en afirmar que espera que «la reforma del sistema sea más beneficiosa para Cataluña», si bien considera improbable que se cumplan sus demandas de una mayor autonomía fiscal.
Es en este escenario en el que Moody’s se basó la pasada semana para anunciar una subida del rating de Cataluña. Pese a que la Generalitat sigue estando calificada como bono basura, la agencia subió un escalón su nota por el impacto que tiene en el acceso a la financiación de los mercados de esta comunidad la mejora del rating de España. De hecho, la agencia recordó ayer que su acceso a la financiación depende del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), que se nutre del Tesoro Público, y advirtió de que si la escena que ha dibujado en su informe se recrudece, tendrá un impacto negativo tanto en la nota de Cataluña como en la de España.
EL MUNDO 07/03/14