Guillermo Rodríguez Pérez-Vozpópuli

  • «Tal vez sólo son indiferentes al dolor y a la labor que desempeñan los guardias civiles y policías», asegura en un texto de opinión

El exsecretario general del PSOE del País Vasco y quien también fuera secretario federal de Relaciones Institucionales del mismo partido, Nicolás Redondo Terreros, se ha mostrado contundente contra el papel del PSOE y sus esfuerzos en «no incomodar» a sus socios en el Congreso, especialmente el PSOE de Cataluña, después de que el Parlament se haya negado a guardar un minuto de silencio por el asesinato de los dos guardias civiles en Barbate durante una operación antidroga.

En un artículo de opinión difundido por la asociación «La España que Reúne» al que ha tenido acceso Vozpópuli, critica la actitud de los socialistas, que asegura que ha generado «un hecho insólito que muestra hasta qué punto un partido tan importante durante décadas como el PSOE busca siempre y en todo momento no incomodar a sus socios parlamentarios».

«La oposición del PSC a expresar las condolencias del Parlamento catalán a la Guardia Civil por el doble asesinato y los heridos graves que aún se encuentran hospitalizados, demuestra una oquedad moral abismal«, asegura en el texto, y añade que el socialismo catalán «se muestra indiferente, alejado de los familiares y compañeros de los miembros de la Benemérita«, ya que uno de los dos agentes asesinados, al que se le ha negado el homenaje, era de Barcelona.

Redondo Terreros analiza en el texto los motivos que llevan al partido al que él perteneció a negar el homenaje a dos agentes asesinados: «Tal vez sea porque consideran que no son sus fuerzas de seguridad, tal vez porque en ellos prima el cálculo político en un escenario tan endiablado como el actual, tal vez porque las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado les son indiferentes o las consideran como un cuerpo molesto e indeseable…», reflexiona.

Por otro lado, desliza que puede ser porque «tal vez sólo son indiferentes al dolor y a la labor que desempeñan los guardias civiles y policías» y que «en cualquiera de los casos, el PSC, por desgracia, contamina a todo el socialismo español«.

Un «problema serio con Sánchez»

Redondo defiende una tesis en su artículo, y no es otra que la de que «si España y la socialdemocracia actual tienen un problema serio con el gobierno del presidente Sánchez, el PSOE lleva teniendo un gravísimo problema con el PSC desde hace décadas».

En este sentido, asegura que de este problema «no sólo se beneficia de su relación con el PSOE, sino que lo tiene capturado tanto en sus postulados más básicos como en la estrategia política y hasta incluso a la hora de hacer nombramientos».
El expolítico cree que «mientras el PSOE siga en manos del PSC no habrá solución ni para el Partido que fundó Pablo Iglesias hace más de 140 años ni para España», y subraya que «de esta relación viciada se ha conseguido catalanizar la política española e introducir el virus de la discordia y la confrontación permanente».

La izquierda catalana y una revolución contra el PSC

Nicolás Redondo ve una solución a todo este asunto, y es que «la izquierda catalana constitucionalista debe rebelarse contra el PSC y el socialismo oficial en el resto de España», pues sostiene que «cada voto que puedan obtener en Cataluña, haciéndose el mayordomo del nacionalismo, quita veinte a los socialistas en el resto de España».

En plural mayestático establece que «tenemos no sólo la necesidad sino también la obligación de que en Cataluña exista otra forma de hacer política de izquierdas, social-liberal, alejada de la inmoralidad que representa la posición del PSC ante los asesinatos de estos dos guardias civiles, más aún, siendo uno de ellos de origen catalán».
Para finalizar su texto, asegura que «se puede ser de izquierdas en Cataluña sin los tejemanejes inmorales y claudicantes de los directivos del socialismo catalán«, y que de la misma manera «también se puede ser de izquierdas sin vestirse de mayordomo en la Diagonal y de capataz en Madrid».