Desde la Fundación para la Libertad queremos trasladar nuestra satisfacción por las conclusiones recogidas en el Informe del Relator Especial de Naciones Unidas sobre promoción y protección de los Derechos Humanos y las libertades fundamentales en la lucha contra el terrorismo. En la sesión del Consejo que se celebrará en Ginebra el día 20 de junio, el Sr. Ben Emmerson presentará un informe en el que por vez primera se constatan avances en el reconocimiento y protección de los derechos de las víctimas del terrorismo, más allá de las meras declaraciones solemnes de solidaridad que desde Naciones Unidas venían formulándose. Se abre un camino que a lo largo de los años ha venido desbrozándose con la participación de algunos colectivos españoles. Entre ellos, la Fundación para la Libertad, que goza de estatus consultivo especial en el Consejo Económico y Social de Naciones Unidas, ha venido acudiendo a las sucesivas sesiones convocadas en Ginebra por el Consejo de Derechos Humanos para dejar sentados una serie de extremos:
- Dejar constancia clara de cómo, en España, la principal vulneración de Derechos Humanos, sistemática y sostenida en el tiempo, es la protagonizada por la actividad terrorista de ETA.
- Denunciar la campaña internacional de los agentes político-sociales que orbitan en torno a ETA-Batasuna y pretenden, valiéndose del desconocimiento y la buena fe de determinadas instancias internacionales, sumar apoyos para su campaña en pos de una indigna impunidad política y judicial para los crímenes cometidos por la banda terrorista ETA y para la re-escritura de una memoria colectiva falseada.
- Proponer la creación de una Relatoría Especial de Naciones Unidas dedicada a la promoción y defensa de los Derechos Humanos en sociedades democráticas afectadas por la lacra terrorista.
Por todo ello, al constatar notables avances en el reconocimiento jurídico de la realidad y de los derechos de las víctimas del terrorismo, como los que se evidencian de la lectura del Informe del Relator, desde la Fundación para la Libertad queremos saludar en primer lugar los esfuerzos de las asociaciones españolas que desde hace años han venido sosteniendo ese esfuerzo y comprometer nuestra decidida voluntad en mantenerlo.
Creemos que es ahora cuando más importantes son el trabajo y la denodada voluntad en el plano internacional dirigidos a consolidar una derrota de ETA plena de auténtico sentido: la que pone en valor la memoria de la realidad de lo sucedido, atiende a las reivindicaciones de las víctimas y cierra el paso al proyecto político totalitario en cuyo nombre fueron asesinadas.
En Bilbao, a 18 de junio de 2012.