Julián Quirós-ABC

 

La encuesta de ABC nos explica la razón del montaje de la izquierda a cuenta de las amenazas postales. El PSOE se está desmoronando y no consigue remontar. El PP madrileño entró en la campaña en una posición muy sólida y ha sabido mantenerse, y Vox, afectado de partida por el efecto Ayuso, ha ido mejorando. El partido socialista, en cambio, cuenta con un candidato ‘sonado’; tras ser intervenido, tutelado, baqueteado y confundido por Pedro Sánchez y su equipo de guionistas. Gabilondo pasó de «con este Iglesias no» a «Pablo, tenemos que hablar», pasó de quedarse sentado en el debate de la Ser a reaccionar una hora después e irse. A Gabilondo le han vuelto loco las instrucciones cambiantes de

Iván Redondo. Hasta el punto de acabar convertido en subsidiario de un debilitado Pablo Iglesias, al que han otorgado el liderazgo de la campaña de señalamiento a la derecha a cuenta de las amenazas. Bien, el truco tampoco ha funcionado. Eso es lo que se desprende de la encuesta que nos ha hecho GAD3.