LUIS VENTOSO – ABC – 30/07/16
· Es fácil saber por qué cae en picado el PSOE.
El Tribunal Constitucional es el garante de nuestra ley máxima. Además, en este instante, es el baluarte que nos protege frente a la sublevación contra España que han iniciado los separatistas catalanes. Como bien explicó ayer la vicepresidenta del Gobierno, estamos ante «una vulneración flagrante del Estado de Derecho y el orden constitucional», con la que pretenden «ponerse por encima de la voluntad de todos los españoles».
El jovial Miquel Iceta dirige desde hace dos años al PSC, la franquicia catalana del PSOE. Fue incapaz de acabar su carrera universitaria y a sus 55 años solo ha trabajado como apparatchik que vive del partido. El pasado 29 de mayo, Iceta marchó en cabeza de una manifestación en Barcelona contra el TC. Lo hizo en compañía de la CUP, ERC y Convergència –los partidos sublevados contra España– y con esteladas a su vera. Es decir: el jefe en Cataluña del partido de Sánchez se manifestó contra el tribunal encargado de defender las libertades de los españoles frente a un envite golpista. ¿Y qué dijo Sánchez ante tal aberración? Pues justificó la presencia allí de Iceta.
¿Por qué cae en picado el PSOE? Es sencillo: porque desde el desvarío zapaterista ha arrumbado su «E» de español y se comporta como un partido felón cada vez que toca defender a su país de sus enemigos separatistas. El viernes, ya en pleno alzamiento contra la legalidad de Convergència y ERC, Sánchez todavía recriminó a Rajoy que mantenga lo que llamó «un cordón sanitario» contra los independentistas y abogó por gobernar España con el apoyo de esas dos formaciones que tratan de reventarla.
Con esa inteligente estrategia de entreguismo ante los enemigos de su país –y con el añadido de su talante personal revirado y soberbio–, el señor Sánchez ha logrado un hito: los dos peores castañazos electorales del PSOE. En las terceras elecciones –que las habrá, y por culpa suya– firmará el portento de empeorar sus tétricos récords.
Querido señor Sánchez: millones de socialistas, de Almería a Astorga pasando por Murcia, Lugo, Málaga o Badalona, han dejado de votarles porque quieren a su país y les repugna un PSOE que en lugar de cerrar filas para proteger a España lleva dos lustros dando coba a los separatistas. Así de fácil.
Con todos sus problemas, pese a su codicioso otoño, pese a los rincones oscuros de su pasado, si mañana el PSOE se librase de Sánchez, un tapón para España y para su partido, y presentase como cabeza de cartel al viejo González, a sus 74 años todavía obtendría unos treinta diputados más que el de la bella percha. ¿Por qué? Pues porque con todos sus lastres, Felipe fue y es un patriota español, mientras que Sánchez solo parece un chisgarabís con el juicio embotado por la egolatría, incapaz de cumplir con su país en lo más básico.
Mientras sigan así, tendiendo la mano a los insurrectos y con una filial pronacionalista en Cataluña, la moto averiada del PSOE continuará acelerando cara al abismo. Echen al desagradable Sánchez de una vez. Elijan a una persona moderada y cabal. Rompan con el PSC y preséntense como PSOE en Cataluña. Ese día su lúgubre sino empezará a cambiar.
LUIS VENTOSO – ABC – 30/07/16