EL MUNDO – 07/08/15
· Bruselas encarga a Interior que elabore la Carta Europea para proteger a quienes sufren violencia.
Son más de 40 años soportando y haciendo frente al terrorismo, y son casi 1.000 los muertos y miles los heridos. Una experiencia que ha colocado a España en el punto de mira de la ONU y la UE, que están dispuestas a aprovecharla.
En el caso de Naciones Unidas, quiere que España ponga negro sobre blanco su historia con el terrorismo, muestre su experiencia y colabore para fijar actuaciones internacionales comunes en la atención a las víctimas. En la misma línea se posiciona la Unión Europea, que pretende que sea España la que elabore la Carta Europea de Atención a las Víctimas del Terrorismo.
La ONU lleva tiempo interesándose por la gestión del Estado español con las víctimas del terrorismo, en particular con quienes han sufrido la violencia de ETA. El máximo organismo internacional ha estudiado los detalles de cómo se ha desarrollado la atención a los que han sufrido el terror, tanto a los directamente afectados como a sus familiares.
También ha querido saber cómo ha evolucionado la legislación española para atender a las víctimas, desde el silencio que caracterizó durante mucho tiempo la actitud hacia quienes sufrían la violencia, hasta la cobertura completa que se pasó a darles posteriormente. Entre los detalles que han interesado a Naciones Unidas figuran las ayudas que reciben las víctimas y los requisitos que España considera claves para definirlas como víctimas del terrorismo.
Durante los últimos meses, los contactos de la ONU con el Ejecutivo español para conocer estos detalles se han intensificado, fundamentalmente con la Dirección General de Víctimas del Terrorismo del Ministerio del Interior. El organismo dirigido por Ban Ki-moon quiere que España sea la referencia de la ONU a la hora de afrontar la atención a las víctimas.
Por su parte, la Unión Europea también ha elegido a España para que dirija la elaboración de la Carta Europea sobre Derechos de las Víctimas del Terrorismo. Se ha encargado al Ejecutivo que elabore este documento común para todos los países miembros, en el que se recogerán los derechos de las víctimas.
Interior, por medio de su directora de atención a Víctimas, Sonia Ramos, ha elaborado ya un borrador. Ramos quiere contar con la colaboración de todas las asociaciones de víctimas para que la carta sea lo más concreta y precisa. Además, el borrador realizado por el Ejecutivo será remitido también al resto de países de la UE para que expongan sus sugerencias. Según explicaron fuentes del Ministerio del Interior, el texto contempla algo más de una treintena de artículos, en los que se trata de recoger los derechos de las víctimas.
Para la ONU y para la UE es clave mimetizar cómo el Estado español ha hecho frente al apoyo económico y emocional de las víctimas y cómo ha puesto medios incluso para su incorporación al mercado laboral con un «pequeño empujón». Porque uno de los datos que más ha tenido en cuenta la ONU es cómo España ha aplicado medidas legislativas no sólo para las víctimas de ETA y sus familias, sino también para los «amenazados» por el terror, para aquellos que han tenido que cambiar su vida a consecuencia de las amenazas de los terroristas.
Aunque durante meses los contactos a nivel internacional entre los responsables de la ONU y las autoridades del Ministerio del Interior han sido constantes, el empuje final para la propuesta oficial del organismo dirigido por Ban Ki-moon se produjo el pasado mes de julio en Madrid, durante la cumbre mundial de expertos para estudiar los comportamientos y modificaciones de los terroristas islamistas. En dicho encuentro, celebrado en Madrid, los responsables de la ONU en materia antiterrorista y atención a víctimas mantuvieron contactos bilaterales con la Dirección General de Apoyo a Víctimas del Terrorismo. Esta dirección es la que gestiona, desde su creación en 2006, todas las ayudas para las víctimas y las subvenciones para las asociaciones. El contacto del equipo de Ramos con los afectados es constante.
Según explicaron a este periódico las mismas fuentes, la ONU se ha dirigido por carta, de modo formal, al Ministerio del Interior para pedirle toda su colaboración a la hora de fijar puntos comunes en la atención a víctimas. En dicha misiva deja claro que su intención es imitar lo máximo posible la manera que tiene España de tratar a las víctimas del terrorismo. La ONU no se fija únicamente en el tratamiento a las que han sufrido el terror de ETA, sino también a cómo ayudó el Estado a las víctimas de los atentados del 11-M.