El lehendakari, Patxi López, ha dicho que le preocupa que fuera de España se vea a ETA «como un movimiento romántico que lucha contra un estado opresor», cuando en realidad «es un movimiento terrorista totalitario y fascista».
López ha sido entrevistado durante media hora en la televisión árabe Al Jazeera, aprovechando que se encuentra esta semana de viaje oficial en Emiratos y Catar.
En la entrevista, el lehendakari ha comentado que «es verdad que tras el último comunicado de ETA se ha abierto una esperanza, pero también es verdad que no ha anunciado su desaparición»
Por ello, ha abogado por tener «toda la prudencia del mundo, mantener la fortaleza del estado de derecho, y la firmeza de que todo el mundo entienda que para hacer política en un país democrático hay que asumir el régimen democrático».
López ha reconocido que hay «una diferencia con otras supuestas treguas que han acabado rompiéndose, y es que la izquierda abertzale quiere seguir su propio camino. El siguiente punto -ha agregado- tiene que ser ahora confirmar que eso es cierto, y hasta que no se confirme no se puede afirmar que esto -el alto el fuego- vaya a ser de verdad».
En la televisión árabe, el lehendakari ha expresado su preocupación por la visión que los medios de comunicación extranjeros han dado de ETA, -donde frecuentemente se han referido a ella como movimiento separatista- «aunque cada vez menos».
«Lo que me preocupa realmente es que se vea a ETA como un movimiento romántico que lucha contra un estado opresor, cuando en realidad es lo contrario, los opresores son ellos. Se trata de un movimiento terrorista totalitario y fascista, porque lo que persigue es la eliminación de cualquier ideología que no sea como la suya», ha agregado López.
Preguntado por el periodista si le parecía bien que hubiera miembros de ETA en el Parlamento Vasco o en las instituciones, ha respondido que «por supuesto, miembros de ETA no. Si son miembros de ETA tienen causas pendientes y deben responder ante la justicia».
También le han preguntado sobre la diferencia entre «un terrorista y un simpatizante», y ha respondido que eso «lo tienen de que determinar los policías y los jueces».
En el caso de que se llegara a un escenario de paz, el lehendakari ha explicado que «nos va a quedar una historia, que es la de la reconciliación, y ahí las víctimas tienen que ser un referente».
Además, ha agregado que «la vida se normalizaría. Cuando los que no defendemos la independencia podamos expresarlo libremente será un día glorioso para todos».
López ha concluido señalando que «lo que tenemos que hacer es dejar de pensar en esencias milenarias y pensar en futuros compartidos».
EL MUNDO, 21/1/2011