ABC 12/11/14
ANTONIO BURGOS
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar castigados sin postre?
AL pie de un árbol sin frutos, concretamente de un nogal que zarandeado ha dado microondas de cartón con una charlotá de votos dentro, me puse a considerar el otro día todo lo bueno de España que se van a perder los separatistas catalanes si se salen con la suya. Que es la nuestra. Pero lo acabo de ver mucho más claro considerándolo desde el otro lado del Ebro. Lo he visto tan nítido como aquel «vaso de agua clara» que dijo Pemán en aquella memorable Tercera de ABC que es la lengua catalana.
El «peor para ellos» de cuánta España van a perder si logran su Juannaja de Levante tiene otra cara: el «peor para nosotros» de toda la cultura española que nos van a negar si se independiza esa parte de esa constitucional «Patria común e indivisible» a la que llamamos Cataluña.
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar castigados sin postre, sin postre de crema catalana?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin salchichón de Vich, con lo bueno que está el salchichón de Vich, que lo echo yo a pelear con el jamón de Jabugo y hasta sale vencedor?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin «La Santa Espina», que es la cultura catalana hecha sardana?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Tàpies?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin escudella y sin calçotada?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Gaudí?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Joan Corominas el del Diccionario Etimológico de la Lengua Castellana?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Joan Manuel Serrat?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Peret y sin rumba catalana?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Salvador Espriu?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Costa Brava?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Joan Miró?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Barça y sin Español de Barcelona?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Pau Casals?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Manolo Vázquez Montalbán?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Benejam el de la Familia Ulises del TBO?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Francisco Ibáñez, sin Mortadelo y sin Filemón?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin cantadas de habaneras?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin la Sagrada Familia?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin el Liceo, sin Montserrat Caballé y sin Josep Carreras?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin monchetas con butifarra?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Mercé Rodoreda?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Joaquín Bernadó y sin Mario Cabré?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Carmen Amaya?
¿Pues no que los separatistas nos quieren dejar sin Messi? Todo lo demás, pase. Ya nos iremos aviando sin esa parte fundamental de la cultura de España,«Patria común e indivisible» según la Constitución que incluso permite que el Gobierno no la haga cumplir. ¿Pero qué va a ser de nosotros sin Messi, Dios mío de mi alma?