Mikel Otegi volverá a sentarse en el banquillo después de que un jurado popular le declarase no culpable
Mikel Otegi volverá a sentarse en el banquilo para ser juzgado por el asesinato de dos ertzainas en 1995, un doble crimen del que fue absuelto en 1997 por un jurado popular. La Fiscalía pedirá 70 años de cárcel para el imputado, que se encuentra en prisión desde mediados de 2009 a la espera del nuevo procesamiento. El Ministerio Público culpó ayer al presunto etarra de los delitos de atentado terrorista, asesinato e integración en banda armada.
Los hechos ocurrieron el 10 de diciembre de 1995. Otegi conducía a velocidad excesiva en dirección a su caserío de Itsasondo, en Guipúzcoa, lo que llamó la atención de una patrulla de la Ertzaintza, compuesta por José Luis González e Ignacio Jesús Mendiluce. Los agentes le siguieron hasta su casa y, una vez allí, se bajaron de su coche para sancionarle por una infracción de tráfico. En ese momento, el acusado salió del domicilio «de modo súbito e inesperado» y armado con una escopeta semiautomática, con la quedisparó contra los ertzainas cuando se encontraban «de espaldas y desprevenidos».
Según la acusación, Otegi mató a los agentes «guiado por el sentimiento de hostilidad», ya que la Policía vasca «había sido marcada como objetivo de ETA». De hecho, tras el crimen, cogió la radio del coche policial y «enorgulleciéndose del hecho» comunicó que «un casero había matado a dos ‘cipayos’».
Pese a todo, el imputado salió libre de cargos en 1997 por decisión de un jurado popular y abandonó el País Vasco. En 2003 fue detenido en la localidad francesa de Irouleguy junto a la presunta etarra Aloña Muñoa y sentenciado a siete años de cárcel en el país vecino por asociación de malhechores.
Esta circunstancia no pasó inadvertida para los tribunales españoles que, aprovechando que en 1997 Otegi no había sido acusado de un delito de terrorismo, pudieron anular la sentencia absolutoria y volver a pedir su procesamiento.
Por otra parte, el fiscal pedirá 268 años de cárcel para Jon Joseba Troitiño Ciria, sobrino del exjefe de ETA Antonio Troitiño, por atentar contra dos hoteles de Alicante y Benidorm el 23 de junio de 2003 con unas bombas que ocasionaron catorce heridos. El Ministerio Público considera suficientemente acreditado que el acusado cometió los atentados «con ánimo de ocasionar el mayor número de daños y matar a agentes de la autoridad».
EL CORREO, 2/6/11