El tripartito tiene que pactar con Batasuna la terna que defienda el plan en Madrid para que no entre ningún representante de PP o PSE, o forzar que venga sólo Ibarretxe.
Ante la decisión del Congreso de llevar a pleno el próximo día 1 el plan Ibarretxe, el Ejecutivo vasco asegura que el único escenario posible es que el Tribunal Constitucional acuerde «la suspensión provisional de dicha sesión, como piden en su recurso el PNV y EA. Pese a la celeridad de los plazos, el Gobierno vasco asegura que el alto tribunal debe pronunciarse antes del próximo martes, fecha en la que se celebrará el pleno en el congreso. Además, cuando se le inquiere por la premura de tiempo, ponen como ejemplo la actuación del TC en la prohibición de la participación de los herederos de Batasuna en las últimas municipales vascas.
En su opinión, no cabe otro escenario posible ya que lo que está en juego es, a su juicio, la cobertura legal de dicha sesión plenaria del Congreso de los Diputados. En caso contario, si llegara a celebrarse el pleno -como todo apunta- el próximo martes sin que el TC se pronunciara, lo haría «con serías dudas» sobre su cobertura constitucional.
En esta línea, la portavoz del ejecutivo vasco, Miren Azkarate restó legitimidad al acuerdo de la mesa del Congreso al afirmar que, no son los órganos de la Cámara baja, sino «el Tribunal Constitucional el que tiene que pronunciarse», ya que es al que le corresponde «determinar si efectivamente procede aplicar el artículo 151.2 de la Constitución».
«Violan» la Constitución
Azkarate, que acusó al PSOE y al PP de «violar» la Constitución, rehusó adelantar acontecimientos y, ante las preguntas de los periodistas, dijo que «no es el momento hoy (por ayer) de hacer previsiones de futuros escenarios». Insistió en que el Ejecutivo de Ibarretxe se mantendrá a la espera de que el TC se pronuncie, si bien añadió que sea cual sea la decisión del TC, el Gobierno de Vitoria «seguirá intentando todas las vías» del Estado de Derecho «para que se respete la Constitución» y se arbitren «los cauces de diálogo y negociación que, como mínimo, se deben a una propuesta democrática aprobada por la mayoría de la Cámara vasca», apostilló.
Para el gobierno autonómico, existe tiempo suficiente para que el Tribunal Constitucional adopte una resolución antes del martes o, en su caso, admita a trámite el recurso del PNV y EA, lo que supondría la «suspensión provisional» del pleno del día 1. Además, recuerda que el alto tribunal ha dado muestras «elocuentes» de celeridad en otras coasiones como cuando decidió, en 24 horas, suspender las candidaturas de Herritarren Zerrenda en las pasadas elecciones municipales.
Mientras tanto, el presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, comunicó, por la tarde, su intención de convocar un pleno el próximo lunes, en la víspera del debate del plan Ibarretxe en el Congreso, para designar a la delegación que acudirá a Madrid a defender dicha propuesta soberanista.
¿Quién defenderá el plan en Madrid?
El Parlamento vasco puede designar hasta tres representantes, según el reglamento de la Cámara que establece que su designación será mediante una única votación. Esto garantiza al tripartito hacerse sólo con dos de los puestos. Así, salvo que el PNV pacte el reparto de esta «terna» con el grupo de la ex Batasuna que lidera Arnaldo Otegi, el tercer designado, en función del mayor número de votos obtenidos, será un parlamentario del PP o del PSE-EE.
Ante esta posibilidad, la hipótesis que cobra mas fuerza es que la Cámara vasca acuerde, finalmente, enviar sólo a un representante y que éste sea el propio lendakari, Juan José Ibarretxe, el único miembro del Gobierno vasco que conserva su escaño. Fuentes del Ejecutivo vasco aseguraron ayer que esta decisión aún no está tomada.
ABC, 26/1/2005