- ¡Blasfemia! ¡Herejía! Mentar a Begoña en el Congreso arriesgaba la excomunión, el destierro al territorio del fango. El próximo miércoles se levanta el tabú durante unos minutos. Señores de PP y Vox, aprovechen la ocasión
Pedro Sánchez envolverá a su esposa en una kafiya (ese trapo palestino) para presentarla en el Congreso. No es que la esposa del jefe del Gobierno se disponga a comparecer en la Cámara para explicar sus business. Es Sánchez quien, a requerimientos del PP, levanta el velo. Unos minutos nada más y en condiciones precarias. Tal hecho ocurrirá cuando se cumplen tres meses de que estallara el escándalo. Sánchez ha accedido a cambio de que el PP no la convoque a la ‘comisión Koldo’ en el Senado. Al tiempo, el PSOE tampoco convoca al novio de Ayuso en su comisión del Congreso. Do ut des.
«Ni el presidente ni el Gobierno tienen nada (sic) que ocultar», afirmó Patxi Demóstenes López al anunciar la novedad. «Ante el acoso político, mediático y judicial», apostillaba El país. Por las dudas, Sánchez sentenciaba este viernes en laSexta que su esposa «lo ha hecho todo bien». Faltaría más.
Al objeto de no hurgar demasiado en las andanzas de Gómez, la mesa del Congreso dispuso que este miércoles aproveche la función para que su esposo informe también sobre el reconocimiento del estado palestino, la última cumbre del Consejo Europeo (tan interesante como un filme de Almodóvar), los vínculos de PP y Vox con el atentado al primer ministro eslovaco (la vice-tres Rivera levantó la liebre), el éxito de Albares en su colosal negociación sobre la última mona de Gibraltar y, si da tiempo, el enorme riesgo para nuestra democracia que supone la presencia de Milei en Madrid.
Una coreografía de impotencias en la que la oposición, sumamente inhábil en esta esgrima, no alcanza siquiera a rozar la mejilla del gran narciso. De ahí que sería oportuno que dispusiera con habilidad el interrogatorio
De esta forma, el jefe del Gobierno dispondrá de unos minutitos para despejar las dudas sobre su esposa que le plateen desde la oposición. Núñez Feijóo ha procurado mostrarse muy sucinto sobre el particular. Suele referirse al ‘entorno’ del presidente, o ‘los problemas en la casa’ del presidente. Ni siquiera el líder gallego perdió el control cuando la vice-uno Montero aventó en el Hemiciclo una noticia fake sobre su esposa.
Apenas se ha escuchado el nombre de Begoña en los debates parlamentarios. Fue Gabriel Rufián, ahora sumido en las turbulencias de su partido, quien desató el tormentón al preguntarle a Sánchez, el 24 de abril, si «cree usted en la Justicia», apenas minutos después de conocerse que un juzgado abría diligencias sobre Gómez. «En un día como hoy, y después de las noticias que he conocido, a pesar de todo, sigo creyendo en la justicia de mi país», respondió el interpelado. Una obviedad tan grande como la boca de Óscar Puente. Un artificio melodramático que, horas después, se concretó en la famosa carta-farsa de amor seguida de los cinco días de retiro espiritual y su vuelta a las andadas.
Estos rifirrafes de los miércoles se pretenden catedral de la polémica, templo de la oratoria y derivan en chamizo de las guantadas, una coreografía de impotencias en la que la oposición, sumamente inhábil en esta esgrima, no alcanza siquiera a rozar la mejilla del gran narciso. De ahí que sería bueno que dispusiera con habilidad el interrogatorio, que se olvidase de las proclamas, la tentación del lucimiento, las ironías inoportunas y se centrara en exponer unas cuantas cuestiones de forma estricta y sin abalorios.
-De todo lo publicado estas semanas, su esposa sólo ha cuestionado un titular. ¿Cabe deducir que todo lo demás es correcto?
-¿Mantuvo su esposa un encuentro con Hidalgo y el ‘comisionista del caso Koldo’ en la habitación del primero, a medianoche, en un hotel de San Petersburgo?
-¿Firmó Globalia un acuerdo con el Africa Center de su esposa antes del rescate de la compañía aérea?
-¿Visitó su esposa en dos ocasiones la sede de Globalia antes de que el Consejo de Ministros aprobara la salvación de Air Europa en un Consejo de Ministros en el que usted no se abstuvo?
-¿Cuántas veces ha viajado en secreto su esposa a Dominicana en el Falcon presidencial?
-¿Usted sabia que su esposa envió dos cartas de recomendación para la UTE de Barrabés, el padrino de su máster, y que consiguió luego sendas adjudicaciones por 14 millones de euros? Ferreras se lo preguntó este viernes y evitó la respuesta. Tan solo repitió lo que viene diciendo en entrevistas varias, que no eran misivas de apoyo a su mentor sino una ‘declaración de interés’. Fue una misiva de recomendación firmada por la esposa del presidente, y ahí está su talón de Aquiles. Y ahí tendrá que insistir este miércoles Feijóo.
Una vez rasgada la cortina de Begoña en el Congreso, debería la oposición aprovecharlo y adentrarse, ya puestos, en las andanzas portuguesas del hermanísimo
Naturalmente, no se escuchará más respuesta que la que esgrimió en casa amiga de laSexta. «No hay caso, hay fango». Arremeterá contra el bulo, la ultraderecha y los pseudomedios y se pensará exonerado de la causa hasta que los tribunales digan lo suyo. El caudillo del progreso descree de las responsabilidades políticas y de la ética democrática, y da por hecho que no hay nadie que le pueda plantar cara al otro lado de su muro.
Una vez rasgada la cortina de Begoña en el Congreso, debería la oposición aprovecharlo y adentrarse, ya puestos, en las andanzas portuguesas del hermanísimo del presidente. Quizás no encaje mucho en eso que Feijóo llama ‘mi estilo’, tan austero como el verbo de un cartujo, pero con este enemigo hay que ir a por todas. Resulta extraño la escasa atención que el PP presta a este asunto, que ya hiede. David Sánchez Pérez-Castejón se desempeña con el seudónimo de Azagra, algo más propio de un torero o un actor que de un director de orquesta. En su curriculum figura un rosario de actividades sospechosas, como ha venido publicando Vozpópuli. Tiene un cargo diseñado a su medida por la Diputación de Badajoz, socialista. Trasladó su residencia a Portugal para esquivar impuestos. Declara como ‘piso’ un chalet de 425 metros y cinco servicios. Reúne un patrimonio millonario que no se compadece con sus ingresos oficiales. Y hasta se permite contratar, a cargo del erario, a un amiguete de Moncloa para que le lleve la gestión de sus óperas en Portugal. Ni que este Azagra fuera Verdi.
La Diputación pacense acaba de aprobar la creación de una comisión para escrutar y fiscalizar todos estos asuntos oscuros que salpican la carrera del gran maestro de la batuta. «Todo es fake, fango», cacarea, casi por imperativo legal, el titular de esta institución, alineado en una familia del PSOE extremeño en el bando opuesto del sanchismo. Empiezan ya brillar las navajas por la zona.
La dona ya tiene abogado
Pensaba Sánchez que su nepotismo estaba blindado, que en este apartado gozaba también de esa impunidad con la que resuelve sus otras cuestiones, bien sea la condescendencia inconstitucional hacia los golpistas catalanes o la corrupción mercantil del koldismo. Algo empieza a irle mal a la famiglia. De ahí las prisas que se da en perseguir jueces y acallar a los medios. De ahí la urgencia en designar abogado, aquel Camacho que sustituyó a Rubalcaba en Interior. Además, zamorano.
Este miércoles, pongamos que se habla de Begoña. Con kafiya o sin ella.