Ni disminución de la condena ni una medida humanitaria de casa por cárcel para intentar impulsar el diálogo Gobierno-oposición. La Corte de Apelaciones de Caracas, controlada por el oficialismo, confirmó en la noche del viernes la sentencia de 13 años, nueve meses y siete días que pesa contra Leopoldo López, el preso político más emblemático del chavismo. El líder opositor está recluido en la cárcel militar de Ramo Verde desde el 18 de febrero de 2014, por las protestas de ese año contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
«Hay que seguir con fuerza porque estamos seguros de que en la siguiente etapa de este juicio será el pueblo de Venezuela quien le quitará las esposas a López, mediante la presión popular y la mayor movilización de todos los tiempos», señaló en un comunicado Voluntad Popular (VP), el partido de López, tras conocer la decisión judicial.
La sentencia es otro motivo para salir a protestar el 1 de septiembre, día en que la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática quiere realizar la «toma de Caracas», protesta en la que se intentará que personas de todo el país viajen a la capital venezolana para exigir al Poder Electoral que el referéndum revocatorio a Maduro se haga este año.
En su decisión, el tribunal ha ignorado un vídeo clave presentado por la defensa, en el que la experta lingüista Rosa Amelia Asuaje –quien durante el juicio analizó el discurso de López en las protestas– afirma que las palabras del dirigente no pudieron causar la violencia de las protestas.
«La jueza Susana Barreritos manipuló mi declaración para inculpar a López. La sentencia parafrasea algo que yo no dije», dice en el vídeo la experta. Sin embargo, el tribunal ha ratificado la condena por la violencia que habría generado el dirigente con su discurso.
El tribunal tampoco ha tomado en cuenta la confesión del fiscal acusador Franklin Nieves, huido a Estados Unidos tras asegurar que todas las pruebas presentadas en el juicio son falsas.
La sentencia desató reacciones de rechazo en Venezuela y en el mundo. «Este gobierno, como su justicia están podridos, ¡son una vergüenza acá y en el mundo! ¡Todo nuestro apoyo a Leopoldo López y a su familia!», destacó Henrique Capriles, gobernador de Miranda, en su cuenta de Twitter.
La MUD coincidió con Voluntad Popular y ratificó que seguirá «luchando para que el inminente triunfo del revocatorio traiga la libertad de López y los presos políticos».
«Los jueces prevarican dictando una sentencia injusta para Leopoldo López, Ángel González, Demian Martin y Christian Holdack [jóvenes del mismo caso], a sabiendas de que no han cometido los delitos que se le imputan y con pleno conocimiento de que se han vulnerado todos sus derechos de defensa», subrayó Felipe González. El ex presidente del gobierno, al igual que el ex ministro Alberto Ruiz-Gallardón, se sumaron a la defensa de López pese a la evidencia, reiterada ayer por el político socialista, de que la justicia venezolana está sometida al poder de Maduro.
Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos, también criticó la decisión: «Repudiamos ratificación injusta condena contra Leopoldo López. En democracia no hay presos políticos. Oportunidad perdida para la reconciliación de Venezuela».
López, preso en la cárcel militar de Ramo Verde, fue condenado por los delitos de incendio, daños e instigación.
Juan Carlos Gutiérrez, abogado defensor, confirmó que la defensa continuará su lucha en instancias nacionales e internacionales. «Actuaremos en paralelo con un recurso de casación y en organizaciones como Naciones Unidas», insistió.
En la decisión, el tribunal sólo redujo la pena de Demian Martin (medidas sustitutivas de libertad) de cuatro años y seis meses a tres años y seis meses.