ABC – 08/07/15
· El alcalde de Bildu fue abucheado durante la procesión de San Fermín.
· Reacción del Ejecutivo El ministro del Interior respalda las acciones legales emprendidas por la delegada del Gobierno.
Mientras en la retina de los pamploneses todavía resiste la imagen de ver la ikurriña presidiendo el chupinazo del día 6, la imposición de la bandera de la Comunidad Autónoma Vasca en el balcón municipal continúa provocando un aluvión de reacciones. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, mantuvo la tesis expresada del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al afirmar que con el izado de la ikurriña se ha incumplido «flagrantemente» la ley, pero también «se han violado flagrantemente los sentimientos de no pocos ciudadanos navarros, una clara mayoría, porque se ha ofendido sus sentimientos», ya que quieren ser «una comunidad foral como es y no que se la pretenda anexionar a otra comunidad autónoma».
Fernández Díaz, además, defendió el recurso presentado por la delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba, ya que ha actuado «conforme al derecho, denunciando ese hecho para que actúe la Justicia», que «hará que se cumpla la ley».
También los socialistas rechazaron la imposición de la bandera de otra Comunidad. El portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados, Antonio Hernando, reconoció ayer que «nosotros no lo hubiésemos hecho, hay que cumplir con la ley». No obstante, mostró su respeto por la ikurriña. «Respetamos la ikurriña como bandera de la Comunidad Autónoma de Euskadi, pero creemos que en el Ayuntamiento de Pamplona tienen que ondear la bandera de Pamplona y las banderas navarras». En la misma línea, los socialistas navarros reprocharon la acción a Asirón y aseguraron que «si no respeta y cumple la ley, se debilita como alcalde ante todos los pamploneses».
De hecho, la imposición de Asirón también provocó el rechazo de buena parte de la ciudadanía que ayer, durante la procesión de San Fermín, abuchearon al nuevo alcalde. El de la ikurriña fue uno de los temas de conversación más extendidos ayer en las terrazas y bares de Pamplona. Incluso más de un ciudadano propuso que el año que viene se invite a parlamentarios del resto de comunidades, por lo que el alcalde, continuando su política, debería colocar las 17 banderas regionales, además de la de Ceuta y Melilla.
También hubo quien, con sorna navarra, sugirió que habría que colocar la bandera de Colombia, Ecuador, Estados Unidos, Francia, Alemania, Australia… ya que «si Asirón puso la ikurriña para que todos se sintieran representados en el balcón municipal, en la plaza Consistorial también había gente de infinidad de nacionalidades que no se sintieron representados por ninguna de las banderas. Y merecen su representación». Y es que el alcalde utilizó a tres parlamentarias vascas de Bildu para imponer la ikurriña como «gesto de respeto» ante las «personalidades institucionales» que acudieron al comienzo de las fiestas más internacionales de España.
«El amigo Mariano»
Eso sí, el alcalde, lejos de amilanarse ante el rechazo mayoritario de su decisión arremetió contra el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el primer cargo nacional en mostrarse contrario a la presencia de una bandera ajena en el balcón municipal de Pamplona. Asirón se refirió a él como «el amigo Mariano» y consideró que «lo que querría es que la ikurriña fuera perseguida y agredida por la plaza».
El Gobierno Vasco defendió la imposición de su bandera en un territorio ajeno. El portavoz del Ejecutivo nacionalista, Josu Erkoreka, mostró «el más absoluto respeto por una decisión adoptada válidamente por otra institución pública, en este caso por el Ayuntamiento de Pamplona». Erkoreka no cayó en la cuenta de que la decisión de colocar la ikurriña en el balcón municipal no fue adoptada por el ayuntamiento, sino que fue una decisión personal de Joseba Asirón. Pero esos pequeños «detalles» parece que no le interesaban demasiado.
ABC – 08/07/15