EL CORREO 05/03/15
Los más de mil kilómetros que separan Bélgica de Euskadi no impidieron ayer que los encuentros de Etxerat con europarlamentarios de diferentes colores –entre los que busca apoyos para el acercamiento de los presos– hayan revuelto las aguas políticas vascas. Tras explicar la asociación de familiares y amigos de presos de ETA que el martes el eurodiputado popular Frank Engel, representante por Luxemburgo, aseguró que «no entendía que la política penitenciaria no se flexibilice», las críticas arreciaron ayer desde varios frentes.
La presidenta del PP vasco en Euskadi, Arantza Quiroga, censuró que el colectivo «se aprovecha de la buena voluntad» así como del «desconocimiento» para contar «una pena» sin hacer referencia al «origen de esa pena, que es una banda terrorista que durante años ha asesinado, ha extorsionado y ha hecho la vida imposible en Euskadi». En su opinión, «hay algunos que por interés propio siguen mirando hacia atrás porque tienen muchas cosas que resolver y muchas explicaciones que dar».
La dirigente autonómica se mostró «convencida» además de que tanto el europarlamentario del PP Carlos Iturgaiz como el propio portavoz del grupo popular en el hemiciclo habrían «tenido una conversación» para «pedir explicaciones» a Engel. No en vano, eurodiputadas como Maite Pagazartundua (UPyD) y Teresa Jiménez Becerril (PP), ambas hermanas de víctimas de ETA, ofrecieron una comparecencia conjunta en la que dejaron clara su postura y criticaron un viaje al que la delegación de Etxerat ha acudido invitada por el eurodiputado de Bildu Josu Juaristi. «Pretenden igualar el sufrimiento de las víctimas del terrorismo con el de los familiares de los asesinos, se intenta neutralizar la responsabilidad por los hechos deplorables que cometieron», denunció la representante de la formación magenta.
Jiménez Becerril consideró que «hay que tener poca vergüenza para venir al Parlamento Europeo, la cuna de los derechos humanos, a pedir comprensión y apoyos para reclamar el acercamiento de presos y comprensión». Es más, argumentó que «lo que ellos buscan en el fondo es la amnistía, no nos engañan».