PP y UPyD plantan a Goioaga en su elección como senador de España

Iñaki Goioaga (Bilbao, 1958) ya es senador español. Abogado de presos y comisario político de ETA según el etarra arrepentido José Miguel Latasa, fue designado ayer con el único apoyo de EH Bildu para ocupar uno de los tres escaños reservados en el Senado para el Parlamento vasco, junto a Jokin Bildarratz (PNV) y Tontxu Rodríguez (PSE-EE).

Los 10 representantes del PP y el de UPyD, que han aplaudido que la Fiscalía de la Audiencia Nacional haya pedido su imputación por integración en banda armada, se ausentaron del hemiciclo en las votaciones de los senadores para no participar en un nombramiento que calificaron de «ofensa» para las víctimas del terrorismo y para las instituciones democráticas.

La elección de los senadores fue el primer punto del primer Pleno ordinario de la nueva legislatura. Es la del regreso a la Cámara vasca de la izquierda abertzale y, a tenor de lo ocurrido en este arranque, también la del regreso de los viejos choques entre constitucionalistas e independentistas, que ayer acudieron al Pleno con carteles a favor de los presos colgados de sus jerséis y chaquetas.

Para PP y UPyD, la sola propuesta de EH Bildu de poner a Goioaga como candidato es una «provocación», una prueba de «insensibilidad intolerable» hacia las víctimas de ETA por parte de la nueva marca abertzale, según Borja Sémper (PP).

Efectivamente, los populares eligieron a uno de sus representantes más aperturistas, que incluso ha sido criticado internamente por su supuesta condescendencia hacia EH Bildu, para dar la réplica a la candidatura de Goioaga. Sémper dejó claro desde el principio que permitir el nombramiento del abogado era «proponer como representante de los vascos [en el Senado] a un miembro de la banda terrorista». Y añadió: «No nos representan tipos como él. Su propuesta será muy legal, sí, pero muy indecente». «Éste es el modelo de ciudadano vasco que EH Bildu quiere que nos represente», añadió Gorka Maneiro (UPyD).

Y, tras formular esta protesta, los diputados de UPyD y PP -éstos renunciando incluso a su candidata a senadora, Juana Iturmendi- se levantaron de su escaño y no asistieron a la votación, que se hizo en dos tandas. En la primera se daba luz verde al informe de compatibilidad, en el que se constataba que los candidatos cumplían los requisitos legales para ser senadores.

Aquí, PNV y EH Bildu votaron a favor, mientras que los 16 diputados del PSE-EE se dividieron en su voto, al parecer por error. Entre los que dieron el sí a Goioaga, a Bildarratz y a Rodríguez, estaban pesos pesados socialistas como Patxi López, José Antonio Pastor, Idoia Mendia y Rodolfo Ares. Otros se abstuvieron y el resto ni siquiera votó.

Después llegó la elección efectiva, con papeletas y sufragio secreto en urna, como en las ocasiones más solemnes. El acuerdo político para que fueran las tres primeras fuerzas tras las últimas elecciones las que enviaran a sus representantes al Senado fructificó, ya que el PNV cedió tres votos al PSE-EE para que alcanzase el mínimo legal de 19. A Goioaga le bastó el apoyo de los suyos.

La designación de Goioaga generó una cascada inusual de reacciones para este tipo de nombramientos. Los senadores del PP José Manuel Barreiro y Ramón Rabanera, por ejemplo, se quejaron, mientras que el socialista Tontxu Rodríguez señaló que el abogado puede ser «propuesto y elegido» perfectamente porque tiene en vigor «todos sus derechos civiles».

· La Guardia Civil sitúa a Goioaga en Halboka

Antes de que Bildu lo colocara de senador, la Guardia Civil ya tenía un puesto para Goioaga: en Halboka, el frente jurídico de ETA, que incluye a los abogados al servicio de la banda. Así consta en un informe del 12 de abril de 2010 incorporado a las diligencias previas 49/2010 y que provocó, dos días después de su llegada a la Audiencia Nacional, una decena de detenciones.

La clave de la operación fue la documentación intervenida en Burdeos al ex número 1 de ETA Thierry, que permitió acceder a lo que la Guardia Civil denomina una «comunicación orgánica» entre dos etarras. El encuentro se produjo a las 12.30 horas del 17 de mayo de 2008 en el Ayuntamiento de la localidad francesa de Mimizan. Jon Salaberria, entonces en la cúpula etarra, entregó un archivo digital a David Pla para que se lo hiciera llegar al Jon Enparantza, miembro de Halboka. La misión de éste era repartir las instrucciones del pendrive a tres bertsolaris, como llama ETA a sus abogados. El gráfico reproducido en esta página incluye fotografías de los destinatarios: Ilazki (Julen Celarain), Marxel (Arantza Zuloeta) y Dinio (Ignacio Goioaga, con foto de la parte inferior derecha). «Todos ellos», dice la Guardia Civil, «pueden ser considerados sin ninguna duda colaboradores legales de ETA y estarían directamente vinculados a la estructura orgánica Halboka».

Del mensaje para Goioaga sólo se conoce el nombre, «Dionixio 805». Como el resto, está encriptado mediante el programa PGP, pero a diferencia de los dirigidos a otros abogados, su contenido no ha podido ser desvelado.

Los compañeros bertsolaris de Goioaga fueron detenidos. Dinio, en cambio, no llegó a estar imputado en esta causa, puesto que ya había sido arrestado meses antes por participar en un supuesto plan de fuga. Por suerte para él. El fiscal pidió 16 años de cárcel e inhabilitación para ser cargo público. Fue absuelto y hoy es senador.