ABC-LUIS VENTOSO
Diez cosas que ya debemos al presidente Sánchez
MIENTRAS media España se hace cruces con un vídeo crítico con el equipo de Soraya, vitriólico, pero normal en cualquier liza de primarias, se habla menos de las proezas de nuestro presidente Sánchez, quien con solo el 25% de los escaños ya ha logrado numerosos éxitos:
1. –Brasa fiscal. Ha reconocido ante la UE que no cumplirá el objetivo de déficit y necesita 5.000 millones con urgencia, que obtendrá crujiéndonos a impuestos.
2. –Reapertura innecesaria de heridas de hace ochenta años. Aquí el presidente de los 84 escaños va a darlo todo. Desenterrará de manera exprés a Franco, del que solo se acordaba Sánchez, y creará una orwelliana Comisión de la Verdad, que convertirá en infractor a todo aquel que ponga en duda la interpretación de la Guerra Civil fijada por la VUP (Verdad Única Progresista).
3. –Carantoñas al golpismo. Sánchez, que comparaba a Torra con Le Pen, lo ha admitido en La Moncloa lazo amarillo en solapa y le ha otorgado trato bilateral, discriminando al resto de las regiones. También le prometió revisar las sentencias del TC, embistiendo así contra el máximo tribunal. Por último, ha concedido beneficios penitenciarios a jefes golpistas sin indicio de arrepentimiento.
4. –Gentilezas con pistoleros etarras. Toca pasar página del dolor de ETA, que así se lo exige el PNV, y tener detalles con los asesinos. Sánchez acercará al País Vasco hasta a uno de los matarifes de Hipercor.
5. –La intromisión más abusiva en la historia de RTVE. Sin pamplinas: control por decreto de la televisión pública de todos los españoles de mano de Podemos y los separatistas. ¿Pluralismo? Por supuesto: TVE podrá ser de izquierdas o muy de izquierdas.
6. –Ofensiva contra los católicos. Si el 70% de los españoles se declaran católicos, tenemos un problema. Sánchez intentará solventarlo con una mano de ingeniería social: eutanasia; amenazas a la educación concertada, porque es demasiado libre, humanista y diferente; y una asignatura para fundar una Ética del Estado (progresista, pues sino no sería ética).
7. –Culto al líder. Se acabó la frivolidad mariana de conceder ruedas de prensa. Sánchez, a lo Erdogan: un presidente que camina sobre las aguas y no admite preguntas abiertas y libres de los periodistas. Solo entrevistas de cámara en medios amigos.
8. –La verdad es elástica. La promesa de convocar elecciones fue burlada, al igual que la de no aceptar votos separatistas para una investidura.
9. –Si la corrupción es propia, no pasa nada. Ha caído un ministro por regatear al fisco, ha sido detenido el presidente socialista de la Diputación de Valencia y el juicio de los ERE es el retrato de una inmensa vergüenza. Cero disculpas.
10. –De espaldas a la Corona. Ni una palabra de apoyo al Jefe del Estado después de que Torra anunciase que lo boicoteará.