La secretaria general de Instituciones Penitenciarias acusa a la organización de imponer una condena adicional a los reclusos
La secretaria general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, afirmó ayer que ETA continúa obstaculizando la «reinserción social» de los presos que cumplen condena y acusó a la organización terrorista de impedir que los reclusos etarras realicen una «reflexión» sobre su pasado e imponerles una condena adicional.
Gallizo ofreció una rueda de prensa en el salón de actos de la prisión alavesa de Nanclares de la Oca para presentar la transferencia del servicio de asistencia sanitaria que opera en las tres cárceles de la CAV. Explicó que la política penitenciaria aplicada no sólo a los presos de ETA sino a todos los reclusos tiene como objetivo su integración social «lejos del mundo que les hizo cometer sus delitos. Todo el mundo que en España está en prisión es porque ha cometido un delito, ha sido juzgado y condenado». «Y que mientras permanezcan en prisión puedan participar de actividades, estudiar, trabajar y, en fin, desarrollar todas aquellas cuestiones que vayan a ayudar a su reinserción. Ese es nuestro trabajo», dijo. Subrayó que precisamente ETA pone obstáculos a que sus presos participen con normalidad en la vida de los centros penitenciarios y dificulta con ello su reinserción social. «Es sorprendente que a un colectivo de presos además de cumplir la pena derivada de su delito y de la condena que le impuso el juez parece que estén obligados a cumplir una segunda pena que les impone su organización».
«Incomprensible»
Añadió que una segunda condena, consistente en prohibirles «desarrollar una vida con normalidad dentro de la prisión, participar de actividades, integrarse, trabajar para su futuro y hacer una propia reflexión sobre su pasado, me parece que es incomprensible y creo que cada vez le parece inaceptable a más gente, que el valor de la libertad personal es fundamental».
Para la secretaria general de Instituciones Penitenciarias, todo el mundo debe ser consciente de la obligación de «aceptar y respetar la ley» y este principio comienza a ser asumido incluso por «una parte de ese mundo de la izquierda abertzale. Una parte de ese mundo ha entendido que hay que aceptar y respetar la ley si se quiere participar en la sociedad, y los presos tienen derecho a ejercer sus derechos».
Tras la rueda de prensa, Gallizo visitó junto con el consejero de Sanidad del Gobierno Vasco, Rafael Bengoa; el delegado del Gobierno en el País Vasco, Mikel Cabieces, y el director de la prisión de Nanclares, Juan Antonio Pérez Zárate, las obras de la futura cárcel de Zaballa, que jubilará el próximo año al actual centro penitenciario de Álava.
DIARIO VASCO, 5/7/11