EL CORREO, 15/10/12
Los responsables de la cárcel de Logroño impiden que la mujer del exlíder de Batasuna le vea, en respuesta a la grabación ilegal emitida por EH Bildu
El exportavoz de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegi, no podrá recibir «temporalmente» visitas en la cárcel de Logroño, donde cumple desde finales de 2009 una condena de seis años y medio por el intento de reconstruir la ilegalizada Batasuna a través del proyecto Bateragune. Instituciones Penitenciarias ha decidido aplicarle esta sanción como «medida cautelar» después de que el recluso haya violado el reglamento de conducta al haber utilizado la llamada telefónica a un familiar para grabar un mensaje de apoyo a EH Bildu. El documento sonoro fue emitido en el mitin de la coalición independentista del pasado sábado.
Apenas unas horas después del acto político de celebrado en el BEC de Barakaldo, la comisión disciplinaria del centro penitenciario de Logroño decidió abrir a Otegi un expediente disciplinario que ayer se concretó en que el recluso tendrá «prohibidas temporalmente algunas comunicaciones», según fuentes del Gobierno central citadas por la agencia Efe. La decisión «cautelar» se ha comunicado ya al Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria, que dirige el magistrado José Luis Castro.
La medida se conoció a primera hora del domingo cuando los guardias de la cárcel denegaron la entrada al recinto de Julia Arregi, la esposa de Otegi, que tenía concertada una visita. El argumento que expuso Instituciones Penitenciarias para justificar ese impedimento es que las comunicaciones con el exterior de la prisión deben tener como objetivo «mantener contacto con las personas cercanas» y no para participar en actos políticos como el del sábado.
La izquierda abertzale salió rápidamente a criticar lo que calificaron como «incomunicación» del líder abertzale. Para la antigua Batasuna, la medida «confirma» que «el Estado está débil» y «carece de argumentos y oferta política», y que el Gobierno de Mariano Rajoy «rehuye el debate político porque se sabe perdedor». A juicio del colectivo, el Estado español responde a las «reivindicaciones» de Euskadi con «negación, bloqueo y vulneración de derechos».
La sanción a Otegi no se conocía, sin embargo, durante el acto político que EH Bildu celebró ayer frente al Hospital de Cruces, en Barakaldo, con el líder de Alternatiba, Oskar Matute, como protagonista. Matute, que no aludió al mensaje del exportavoz de Batasuna, sí dijo que el mitin del BEC evidenció «el clamor de un pueblo que quiere ser libre y aspira a la independencia».
EL CORREO, 15/10/12