Pros y contras del miedo

ABC – 15/07/16 – HERMANN TERTSCH

Hermann Tertsch
Hermann Tertsch

· En el Reino Unido no funcionó la campaña que auguraba un futuro catastrófico para el caso de que triunfara la salida de la UE.

Mucho se ha hablado de la campaña del miedo en las pasadas elecciones en España, como también en la campaña sobre el Brexit en el Reino Unido. Dicen que en España la campaña funcionó el 26 de junio porque muchos votantes, los suficientes, tuvieron miedo a que llegaran al poder los neocomunistas de Podemos. Ante la sospecha muy razonable de que, pese a su manía de disfrazarse cada día de otra cosa, al final acabaran pareciéndose demasiado a los comunistas de siempre.

En cambio, en el Reino Unido, no funcionó la campaña que auguraba un futuro catastrófico para el caso de que triunfara la salida de la Unión Europea. La democracia más antigua del mundo votó por irse de la UE. Porque su rechazo a prácticas de la UE superaron al miedo a lo desconocido. Estrenará independencia con todos sus pros y contras. Los contras son enormes y es cierto que dan miedo. Pero cuando se piensa en ventajas de no estar en la UE surgen cada vez más, y eso es grave. No extraña que cada vez sean más los europeos que creen que, o las cosas se cambian radicalmente, o lo mejor es salirse de un club donde pierdes soberanía, pierdes libertad de actuación y se te imponen leyes y decisiones absurdas o indignas a cuyos autores ni votaste ni podrás echar.

Cuando se piensa en ello la rabia puede llegar a superar al miedo a la soledad. Las ofensas son también del día a día. Vean la rabia que genera por la intolerable inmoralidad que supone que la UE apoye la infame actuación del expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero en Venezuela para salvar al presidente Nicolás Maduro y su régimen de militares corruptos, narcotraficantes y colectivos del hampa que aterrorizan a la población civil. Para dar el portazo es sin ir más lejos ver los sueldos de los personajes mediocres que pululan por el Parlamento Europeo, una casta que tiene miedo al fin del chollo de un abuso que se va pareciendo al pozo corrupto de las Naciones Unidas.

Frente al miedo prudente del voto anti-Podemos está el miedo paralizante. Que es el común. Miedo hay mucho en una Europa en la que todo se mueve, porque los anclajes de las convicciones, convenciones y valores se han roto o soltado con el relativismo infinito. Con la infinita tolerancia a todo lo intolerable se huye del conflicto inmediato y se transige hasta que amenazan con romperse todos los diques. Y miedo/pánico comienzan a tener los gobernantes a sus electores.

En España hay más. Aquí tiene miedo todo el mundo. Los grandes empresarios se lo tienen al Gobierno que controla el BOE. Por eso jamás tienen el valor de decir una verdad inconveniente para el Gobierno ni para esas 17 réplicas del Estado de un sistema autonómico grotesco y fuera de control. Miedo tienen los medios de comunicación a los grandes empresarios que ponen y quitan publicidad. Miedo tienen las empresas a los periodistas por lo que las más grandes los meten en nómina. Y miedo tienen los periodistas a dejar de estar en nómina en unos sitios y en otros. Miedo tienen todos al Gobierno que nunca había utilizado como este su poder para influir en los medios y en los profesionales. Miedo tiene la población por supuesto al paro y a la pobreza. Miedo tienen las elites en su infinita codicia. Pero miedo se tiene hoy en España sobre todo a decir la verdad. Porque hay una jauría que persigue y castiga la verdad y por indolencia o cobardía no hay apenas nadie que la defienda.

ABC – 15/07/16 – HERMANN TERTSCH