ABC-LUIS VENTOSO
Es innegable que Sánchez cometió plagio en su tesis y en su libro
ESTÁ en marcha desde el Gobierno y sus medios afines un intento de tapar con un manto del olvido el hecho de que el actual –y probablemente eventual– presidente del Gobierno hizo trampas en su tesis doctoral y en el libro que publicó al año siguiente basado en ella. Tal estratagema de amnesia se puso de manifiesto con descaro en la rueda de prensa del consejo de ministros del pasado viernes. La ministra portavoz respondió a una docena de preguntas, incluida una de la televisión holandesa, pero negó la palabra a los periodistas de los dos periódicos de mayor difusión en la capital de España, «El País», que acababa de revelar que Sánchez cometió plagios muy zafios en su libro; y ABC, que el pasado 13 de septiembre destapó que la tesis del hoy presidente incluye numerosos corta y pega y citas sin la pertinente referencia. En España se está tolerando algo infeccioso: la ideología se antepone a la verdad. Esta miopía dogmática está llevando a personas y medios «progresistas» a exculpar apriorísticamente a Sánchez, cuando las pruebas en su contra son irrefutables:
–¿Cometió Sánchez plagios en su tesis? Sí, pues incluye pasajes de textos de otros autores sin entrecomillarlos ni referenciarlos a pie de página, prácticas proscritas, que de ser conocidas le habrían impedido doctorarse. Además, incurrió en autoplagio, pues recogió textos de artículos suyos previos, algo que no está admitido académicamente, y hasta fusiló material de la Administración y rellenó su tesis con tablas de estadísticas gubernamentales.
–¿Cometió Sánchez plagio en su libro? Aquí fue todavía más burdo. Fusiló conferencias ajenas y su descuido llegó al extremo de plagiar dos veces una cita en una misma página, como contó ayer ABC. El libro incrementa además las sospechas sobre la tesis: ¿Qué persona que ha dedicado un esfuerzo ingente de años a ella renunciaría a atribuirse el trabajo y lo compartiría con otro? ¿Qué le debía Sánchez a Carlos Ocaña como para convertirlo en coautor del libro basado en la tesis?
–¿Volvió a hacer trampas Sánchez al intentar exculparse? La firma alemana de software antiplagio PlagScan sostiene que sí. Tras la exclusiva de ABC, Sánchez trató de refutarla asegurando que La Moncloa había sometido la tesis al programa antiplagio de PlagScan y solo daba un 0,96% de copia. Pero la compañía germana discrepa. Aseguran que a ellos les sale el 21% de plagio y acusan a La Moncloa de manipulación. El Gobierno guarda silencio sobre esa gravísima acusación, incapaz de desmentirla.
–¿Ha mentido Sánchez? Reiteradamente. A pesar de las evidencias, negó las acusaciones de ABC y hasta amenazó al periódico con tribunales (amenaza que no ha consumado, pues perdería el juicio). Además, a pregunta de Rivera, aseguró en el Parlamento que su tesis estaba colgada en internet a disposición de todos, pero dos días después el Gobierno anunció que la subía a la red, evidenciando así patosamente que el presidente había mentido en sede parlamentaria.
Ante estas pruebas de cargo, ¿tendría que dimitir Sánchez en cualquier democracia de solera? Huelga responder.