EL DIARIO VASCO, 29/7/2011
Había interés por ver cuál sería la posición de Bildu en el debate a favor de la disolución de ETA que se celebró ayer en el pleno del Ayuntamiento de San Sebastián, pero la coalición no se salió del guión que ha mantenido en casi todos los consistorios vascos donde se han votado mociones sobre el final de la violencia y declinó participar en la votación.
Ni siquiera hubo un gesto como el que se produjo el martes en Errenteria, donde el alcalde de Bildu, Julen Mendoza, dijo compartir «al cien por cien» el texto de una moción de rechazo a ETA, aunque no lo votase. Ayer Juan Karlos Izagirre, alcalde de Donostia, no tomó la palabra en este punto y fue el concejal de Bildu Josu Ruiz, de EA, el encargado de leer una declaración en la que afirmó que «es tiempo de soluciones y el camino de la paz no tiene vuelta atrás», pero en la que no hizo ninguna referencia a ETA.
Este «silencio» de Bildu provocó duras críticas de los tres grupos de la oposición -PSE, PP y PNV-, que por primera vez desde el 22M habían presentado una moción de rechazo a la violencia prácticamente consensuada. El PSE había tramitado un texto de un único párrafo en el que se exigía «una vez más a ETA su disolución». El PP presentó inicialmente la misma moción que ha defendido en todos los ayuntamientos vascos, aunque en aras del consenso decidió retirarla y unirse a la del PSE, añadiéndole la frase «y condena los 102 asesinatos perpetrados en nuestra ciudad». El PNV, por su parte, añadió dos párrafos más a la moción, en el segundo de los cuales se defendían «procesos de diálogo» para abordar el final de la violencia. Como la moción se votó por puntos, los tres partidos de la oposición respaldaron todos los párrafos a excepción del PP, que se abstuvo en el referente al diálogo. Bildu no votó ninguno de ellos.
En la declaración que leyó Josu Ruiz como representante de Bildu afirmó que «se ha abierto un nuevo tiempo político para avanzar en el camino de la paz», pidió el respeto «a todos los derechos», dijo que «con generosidad ganaremos todos» y destacó «el compromiso de este Ayuntamiento para impulsar una paz irreversible». Hizo referencia también al Acuerdo de Gernika, «la reparación a todas las víctimas» y «el fin de los encarcelamientos y las torturas».
El portavoz del PSE, Ernesto Gasco, dijo haber vivido «un momento amargo» al ver la reacción de Bildu ante esta moción, «porque era una declaración con el mayor acuerdo que se ha logrado hasta ahora en todo Euskadi y Bildu ha perdido una ocasión para hacer historia y demostrar que su postura en contra de la violencia es sincera». Gasco señaló que «el silencio les hace cómplices de ETA y callarse es permitir su tutela. Y lo peor es ver que los nuevos tiempos de los que hablan son a peor, porque EA y Alternatiba han condenado a ETA en este mismo Ayuntamiento y hoy Josu Ruiz (EA) ha evitado hasta pronunciar el nombre de la organización. Han caído en la trampa de ETA».
«No sean cobardes»
El portavoz del PP, Ramón Gómez, tuvo «un recuerdo para las 102 víctimas mortales de ETA en San Sebastián, en especial para Gregorio Ordóñez, que si no hubiera sido asesinado habría llegado a alcalde de esta ciudad», y reclamó a los concejales de Bildu que «no sean cobardes y den el paso de pedir a ETA que desaparezca y que pida perdón por todo el daño que ha causado». Gómez se dirigió a Josu Ruiz y le espetó: «No nos cuente milongas, ¿condenan los asesinatos de ETA o no? No nos hable de lo que dice el Acuerdo de Gernika, díganlo ustedes aquí, en la ciudad donde gobiernan. Sean valientes».
Eneko Goia, portavoz del PNV, abrió su turno de palabra con «una confesión». Explicó que se había dirigido a Bildu para tratar de buscar un consenso en este tema y que la respuesta había sido que iban a hacer lo mismo que en otros ayuntamientos. «Es decir: dónde vas, manzanas traigo». Goia lamentó que «hemos perdido una nueva oportunidad para dar un paso más en un camino al que todos estamos abocados. Si Izagirre reconoce que antes o después Bildu participará en homenajes a víctimas, estaría bien que fuera más pronto que tarde. Hoy han vuelto a perder una nueva oportunidad».
El TAV y la pasarela
La moción contra ETA no fue la única en la que los ocho concejales de Bildu se quedaron solos contra los 19 de la oposición en el pleno donostiarra de ayer. Ocurrió también con las mociones a favor de la llegada del Tren de Alta Velocidad a San Sebastián y la construcción de la pasarela de Monpas, dos proyectos con los que Bildu no tiene sintonía.
El texto sobre el TAV hablaba del «apoyo del Ayuntamiento a este proyecto con el objeto de garantizar su ejecución». Bildu presentó una enmienda a la totalidad en la que se pedía un «debate social» sobre la necesidad de este proyecto, pero se quedó solo al defenderla, mientras que la oposición aprobó en bloque la moción inicial. Lo mismo ocurrió con la «petición al Ministerio de Medio Ambiente del envío del proyecto de construcción de la pasarela de Monpas».