ABC – 12/01/16
· Los socialistas están dispuestos a ceder una vicepresidencia de la Cámara a los de Rivera.
· El PSOE (90 diputados) y Ciudadanos (40) negocian unir sus 130 escaños para convertir al exlendakari socialista, Patxi López, en el próximo presidente del Congreso.
La votación será mañana, miércoles, cuando se constituyan las Cortes, pero ayer las negociaciones entre ambas partes eran frenéticas, con contactos «cada hora» para ver la múltiple casuística de la compleja elección. Sería la primera vez en democracia que el presidente del Congreso no es del partido más votado, pero todos, excepto el PP, parecen de acuerdo en propiciarlo.
La formación naranja cree que este es el modelo que debe instaurarse, por lo que la presidencia de López podría ser temporal. Y es que Ciudadanos ha trasladado a los socialistas su deseo de que si no es el actual inquilino de Moncloa, Mariano Rajoy, el que logra formar gobierno sino el líder del PSOE, Pedro Sánchez, la presidencia del Congreso cambie de color para estar ocupada por el candidato del PP.
Sería un compromiso verbal, como el que parece que el PSOE va a establecer con Ciudadanos para cederle una vicepresidencia de la Cámara Baja. Además, la presidencia de Patxi López puede ser breve por otra razón: las dificultades que rodean a los distintos pactos de Gobierno y la posible convocatoria de nuevas elecciones que aún planea sobre el horizonte político. Los contactos, no obstante, continuaron ayer «entre todos con todos», según fuentes de las negociaciones.
Podemos, enrocado
El acercamiento entre los socialistas y la formación que lidera Albert Rivera se produce ante la falta de avances en las negociaciones entre Podemos y el PSOE. La formación que lidera Pablo Iglesias sigue supeditando su apoyo a López a que se le permita dividir su grupo parlamentario en cuatro –cuadruplicando así su presupuesto y turnos de palabra–, en contra de lo establecido en el Reglamento del Congreso y de los propios intereses de los socialistas. Pero el propio López dijo ayer que «es claro» que eso no puede llevarse a cabo. Al PSOE solo le resta ahora confiar en que Podemos no apoye al candidato del PP, lo que parece bastante probable. Ello es así por la peculiaridad que rige la elección del presidente del Congreso.
En primera votación, el candidato debe salir elegido por mayoría absoluta. A falta de esta, la segunda votación se realiza entre los dos candidatos más votados, los propuestos por PP y PSOE. Socialistas mas Ciudadanos suman 130, superando los 122 del PP y la abstención del resto de los grupos: Podemos, ERC, DyL, PNV, IU, EH-Bildu y Coalición Canaria, que en el PSOE se daba ayer por segura. Junto a López, el PSOE quiere en la Mesa a Micaela Navarro, presidenta del partido, y a la secretaria de Organización del PSdeG, Pilar Cancela.
Pese a la insistencia de Ciudadanos en que el presidente del Congreso sea de otro partido que el del Gobierno, hay dos peligros: uno, que como tercera autoridad del Estado, lo representa en determinados viajes oficiales y podría dar lugar a conflicto en las relaciones internacionales. Asimismo, podría dificular las tramitaciones legislativas del Gobierno solicitando, por ejemplo, informes jurídicos.
ABC – 12/01/16