ABC 19/02/16
BIEITO RUBIDO
Cuesta convencer a una parte significativa de los votantes del PP de que Rajoy debe abstenerse y propiciar un gobierno entre PSOE y Ciudadanos. Entre otras razones, porque su partido ha sido el más votado y, en las democracias normales, el ganador suele ocupar la presidencia. No se comprende muy bien que, tras 17 negativas, el premio para Pedro Sánchez sea recibir el apoyo de aquel de quien ha renegado. La situación es tan enrevesada que puede ocurrir una cosa y la contraria, y siempre habrá quien encuentre argumentos para justificarlas en el más puro método marxista; al de Groucho, me refiero. Los más entusiastas de la abstención del PP son algunos empresarios. Sus mensajes no se escuchan, sin embargo, en las plantas altas de Génova. De ahí que Mariano Rajoy vea más probables unas nuevas elecciones que una investidura contra el resultado de las urnas. En definitiva, parece lógico que algunos entiendan que la gobernabilidad de España no es a cualquier precio y, ya que nadie cede, que hable el pueblo.