EL CORREO 08/12/13
· Encapuchados lanzaron pintura roja y amarilla y pegaron un cartel con el lema ‘Esto no es España’
Un grupo de cuatro encapuchados que cubría su rostro con caretas blancas protagonizó el viernes, festividad de la Constitución, un sabotaje contra el Ayuntamiento de Basauri. Los radicales lanzaron varios cubos de pintura roja y amarilla contra la puerta de acceso al edificio consistorial y pegaron un cartel en el que se leía en euskera el lema ‘Esto no es España’. El ataque se registró a plena luz del día ante un edificio que se encontraba cerrado al tratarse de una jornada festiva.
Los alborotadores grabaron toda la acción y elaboraron un vídeo que ayer se podía ver en Internet. El reportaje acaba con la frase «Ante la imposición: desobediencia». No es la primera vez que un sabotaje de este tipo ocurrido en Basauri se difunde luego por redes como ‘Youtube’. A comienzos de este mismo año, un grupo de radicales pintó con grandes letras negras la palabra ‘independencia’ en la fachada del cuartel que la Policía Nacional tiene en esta localidad vizcaína próximo al centro penitenciario de Bizkaia. Las imágenes también se pudieron ver después por Internet.
La pintura tirada contra la fachada del Ayuntamiento y el cartel apenas permanecieron a la vista. Los servicios de limpieza municipal procedieron con rapidez a adecentar la puerta de acceso al inmueble.
El ataque recibió ayer la condena de todos los grupos políticos con representación en el Consistorio excepto Bildu. «Pasan por encima de las legítimas ideas de todos y demuestran su desprecio por la libertad de expresión de sus vecinos y los fundamentos más elementales de la democracia y la convivencia», sostiene el texto suscrito por PNV –al frente del gobierno local–, PSE y PP. Las tres formaciones consideran que «actitudes antidemocráticas como éstas están boicoteando el proceso de avance hacia una Euskadi en total paz y libertad que todos los demás nos estamos esforzando en llevar adelante».
El incidente se registra, además, después de la polémica que se vivió en el último pleno de la localidad, el pasado jueves, cuando el alcalde permitió que el ex preso de ETA Koldo Aparicio –liberado por el final de la ‘doctrina Parot’– interviniera durante la sesión para criticar la política penitenciaria. Un discurso que provocó la protesta del PP.