DIARIO VASCO, 17/1/12
Sarkozy dice en Madrid que los etarras «rendirán cuentas» pese al final de la violencia. Los dos presidentes se reúnen en la entrega al líder galo del Toisón de Oro, dos días después de la operación policial en Francia
Mariano Rajoy y Nicolas Sarkozy coincidieron ayer en advertir a ETA de que mientras no se disuelva, mantendrán sobre ella la presión policial y judicial. Tan sólo 48 horas después de la última operación contra la organización terrorista en Francia, el presidente del Gobierno y su homólogo francés se vieron las caras en Madrid. Sarkozy estaba citado para recibir del Rey Juan Carlos el collar del Toisón de Oro por su colaboración, primero como ministro del Interior y después como presidente de la República, en la lucha antiterrorista. Un acto al que la Casa Real quiso dar la solemnidad de las grandes ocasiones, y que congregó al presidente del Gobierno, sus tres antecesores, entre ellos Zapatero, y las principales autoridades españolas.
La entrega sirvió para escuchar el primer mensaje explícitamente dirigido a ETA que lanza Rajoy como presidente. El mandatario popular afirmó que, a pesar de los anuncios de alto el fuego de ETA, «el Estado de Derecho no está en suspenso y no lo va a estar» hasta que dé «el paso definitivo» de disolverse y entregar las armas. «Mientras ETA siga existiendo -sostuvo Rajoy- es una organización terrorista y sus miembros son miembros de una organización terrorista».
El presidente del Gobierno fue el encargado de ensalzar la colaboración francesa. Después de conversar durante una hora en el palacio de la Moncloa con Sarkozy, el presidente del Gobierno subrayó que los tres presuntos terroristas detenidos «habían hecho acopio de explosivos y armas» en las últimas semanas, a pesar del anuncio del fin de la actividad armada. Una opinión que discrepa con algunas fuentes de la lucha antiterrorista que sostienen que el material incautado a Etxeberria Oiarbide y sus dos compañeros sirve, sobre todo, para falsificar documentos de identidad y solo tiene usos secundarios en la fabricación de explosivos. Las pistolas incautadas, además, corresponden a las robadas en la armería de Vauvert en octubre de 2006. En todo caso, Rajoy demandó de ETA «respeto al derecho de los ciudadanos y el anuncio de su disolución como banda criminal».
Sarkozy también se mostró firme contra ETA. «No hay más Pirineos en la lucha contra el terrorismo». Con esta frase, el presidente de Francia sintetizó así la engrasada unidad de acción entre su país y España en la persecución de ETA. Para Sarkozy, la expresión de que «África empieza en los Pirineos», atribuida al escritor francés Alejandro Dumas aunque también hay autores que se la endilgan al rey Luis XVI, carece de sentido, al menos en lo que a la lucha contra ETA se refiere. El presidente francés pronunció un sentido discurso en el Salón de Columnas del Palacio Real, en el que avisó a los etarras de que tendrán que «rendir cuentas» en España, pero también en su país «los que han asesinado en Francia». Se refería a los autores de la muerte del gendarme Jean Serge Nérin el 16 de marzo de 2010, uno de los cuales, según la Policía gala, puede ser Jon Etxeberria Oiarbide, detenido el sábado en la localidad francesa de Joigny. Sarkozy indicó que las fuerzas de seguridad de su país tienen «elementos» para creer que el presunto etarra participó en el tiroteo que segó la vida del agente.
Firmeza y mano tendida
El presidente francés garantizó que las fuerzas de seguridad de los dos países tendrán un mismo objetivo, «terminar definitivamente con la violencia», y para alcanzar esa meta, Francia «siempre» colaborará. Hizo una velada alusión al anuncio de ETA del 20 de octubre sobre el final de la violencia, ante el que consideró factible combinar los «medios policiales» con «discutir el final» del terrorismo con sus responsables. Ambos, dijo, son «elementos que permiten obtener resultados».
No se olvidó de las víctimas del terrorismo, «mujeres que han perdido el marido, padres que han perdido hijos», cuyo resarcimiento, dijo, debe plasmarse en la derrota de ETA. Sarkozy además agradeció con énfasis la concesión del Toisón de Oro porque ha sido y es «un orgullo» haber estado estos años «al lado del pueblo español para defender la libertad y el Estado de Derecho contra el terrorismo más bárbaro», el del «chantaje, la extorsión y el asesinato».
La decisión de otorgar al presidente francés la mayor condecoración española es un gesto extraordinario con el que el rey quiso mostrar el agradecimiento al empeño de Sarkozy en la lucha contra ETA. En la actualidad hay un centenar y medio de etarras encarcelados en Francia, y desde que accedió al palacio del Elíseo en junio de 2007 las fuerzas de seguridad francesa, en colaboración con la Policía y la Guardia Civil, han capturado a 146 miembros de ETA. Solo en 2008 detuvieron a 33 y en 2009 a 31, entre ellos los seis últimos jefes militares de la organización terrorista.
Además de la reunión Rajoy-Sarkozy, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, se entrevistó a su vez con su homólogo francés, Claude Guéant, para intercambiar información sobre la operación del pasado sábado, que permitió el arresto de Etxeberria Oiarbide y dos de sus supuestos colaboradores en el aparato logístico de ETA.
Don Juan Carlos no economizó los elogios para describir la actitud del presidente francés en la lucha antiterrorista. Sarkozy, dijo, «ha contribuido de modo constante, efectivo y generoso» en la persecución de ETA, y ha proporcionado de forma «firme y eficaz la mayor colaboración política, policial y judicial» para liquidar el terrorismo «con las víctimas como norte».
DIARIO VASCO, 17/1/12