Rajoy forma Gobierno con seis caras nuevas

ABC 04/11/16

· Santamaría sigue como vicepresidenta única y Cospedal asume Defensa
· El nuevo portavoz será Íñigo Méndez de Vigo en un Gobierno de 13 ministerios, donde entran Zoido en Interior y Dastis en Exteriores

Mariano Rajoy desveló ayer los 13 nombres de los ministros de su nuevo Gobierno a las siete menos cinco de la tarde, a través de un comunicado, después de informar al Rey en el Palacio de la Zarzuela. En su Gobierno mantiene a Soraya Sáenz de Santamaría como vicepresidenta única con una competencia más, Administraciones Territoriales, pero sin la función de portavoz del Gobierno, que asumirá Íñigo Méndez de Vigo, ministro de Educación, Cultura y Deportes. Además, María Dolores de Cospedal va finalmente al Ministerio de Defensa, mientras que Juan Ignacio Zoido asume la cartera de Interior, y Alfonso Dastis se queda con el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación.

El Gobierno de Rajoy tiene una media de edad de 52 años, seis caras nuevas y tres salidas. Se constituye, además, el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, que encabezará Álvaro Nadal, y se unen Economía e Industria, con un Guindos reforzado.

En el organigrama, lo primero que llama la atención es que Rajoy sigue teniendo una sola Vicepresidencia, la de Sáenz de Santamaría, a pesar de todos los rumores que habían apuntado a otra económica o incluso social. La «número dos» del Ejecutivo no compartirá ya la mesa del Consejo de Ministros con José Manuel García-Margallo, con el que la relación llegó a ser bastante tensa entre ambos. Margallo es uno de los tres nombres que salen del Ejecutivo de Rajoy, junto a Jorge Fernández Díaz y Pedro Morenés.

Dastis, discreción exterior
El nuevo ministro de Exteriores y Cooperación es Alfonso Dastis, un diplomático experto en la Unión Europea y discreto negociador, muy próximo a Méndez de Vigo. Rajoy ha apostado claramente por un perfil más de gestión en este Ministerio, frente a la carga política que introdujo Margallo, sobre todo en los últimos años.

El peso de Méndez de Vigo ha ido a más en el equipo de Rajoy, desde que entrara en el Gobierno en la recta final de la legislatura que acabó en 2015. Sustituyó a José Ignacio Wert en el verano de ese año, cuando quedaban pocos meses para que concluyera el mandato, pero el tiempo, casi todo en funciones, le ha reforzado en su posición, en un área, la de Educación, que es fundamental para Rajoy en esta legislatura. El presidente quiere un pacto nacional en ese ámbito. «Solo por eso valdría la pena toda la legislatura», comentan en La Moncloa.

Otra de las claves políticas del nuevo Gobierno es la entrada de la secretaria general del PP, María Dolores de

Cospedal, que será ministra de Defensa. Se trata de una cartera lucida, pero fuera de la batalla política del día a día, lo que puede evitar, en teoría, choques con la vicepresidenta, con quien no tiene una relación cercana.

El Ministerio del Interior lo presidirá Juan Ignacio Zoido, juez de carrera y exalcalde de Sevilla, que estaba al frente de la Comisión Constitucional. Interior es una de las carteras más sensibles del Ejecutivo, siempre en el ojo del huracán. El ministro saliente, Jorge Fernández-Diaz, acababa de ser reprobado por la oposición en el Congreso por el caso de las grabaciones en su despacho.

Rafael Catalá es uno de los siete ministros que repiten cartera. Se mantiene en Justicia, donde había conseguido apaciguar a un sector que se enfrentó al Gobierno en la etapa anterior, pero sigue pendiente el pacto por la Justicia.

En el área económica Rajoy ha apostado por la continuidad de un equipo en el que confía plenamente, y que ha estado detrás de la recuperación económica y de las medidas que han permitido volver a crear empleo. En la pugna entre Luis de Guindos y Cristóbal Montoro, el primero sale fortalecido con más funciones.

 

· El Nuevo Portavoz
Méndez de Vigo entró en el Gobierno de Rajoy en el verano de 2015 y ha ganado peso con el tiempo

 

Función Pública
De Guindos seguirá siendo ministro de Economía y Competitividad, pero se queda con la competencia de Industria, que mantenía en funciones tras la dimisión de José Manuel Soria. Montoro continúa como titular de Hacienda, pero la otra pata de su Ministerio hasta ahora, Administraciones Públicas, queda reducida a la «Función Pública». Toda la parte política de la Administración Territorial es la que va a la Vicepresidencia que encabeza Sáenz de Santamaría.

Al equipo económico ministerial se suma a partir de ahora Álvaro Nadal, quien ya había trabajado en ese terreno para el presidente del Gobierno más desde la sombra, al ser hasta ahora el director de la Oficina Económica de Moncloa. Nadal es una de las personas en las que más confía Rajoy en su núcleo duro monclovita. El presidente le premia ahora con el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, unas competencias que proceden, en su mayor parte, del anterior Ministerio de Industria, ahora desaparecido en el organigrama como tal.

Nadal ha sido una de las personas más relevantes en las conversaciones que ha mantenido el Gobierno con Ciudadanos durante el pasado verano, y que dieron lugar al documento de 150 puntos, firmado por Mariano Rajoy y Albert Rivera. Ese acuerdo fue la base para que Ciudadanos votara a favor de la candidatura de Rajoy en su investidura.

En esas negociaciones con Ciudadanos hubo otras dos personas que tuvieron un papel muy destacable, y que ahora ocupan un lugar relevante también el Gobierno de Rajoy. Por un lado está Fátima Báñez, que repite como ministra de Empleo y Seguridad Social, lo que es algo muy significativo, ya que suele ser un Ministerio que «quema» al ministro que lo toca, y en el que no se suele repetir. Rajoy ha tenido en cuenta las dotes dialogantes y negociadoras de Báñez, pero también los datos de empleo. La nueva ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, es la otra persona que tuvo un papel relevante en aquellas conversaciones con Ciudadanos, que Rajoy ha valorado de forma especial. Montserrat es la única catalana del Ejecutivo, tras la salida de Fernández Díaz.

El Gobierno se completa con el nombramiento del alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, como ministro de Fomento, y la continuidad de Isabel García Tejerina al frente de Agricultura y Medio Ambiente.