EL MUNDO – 23/07/14
· Moncloa modifica la agenda y da prioridad al encuentro con Sánchez / La Generalitat afirma que el ‘president’ viene a Madrid a hablar de la consulta.
Rajoy quiere conformar «una posición de Estado», «una respuesta de Estado», frente al desafío independentista del presidente de la Generalitat, Artur Mas, como confirmaron ayer fuentes de Moncloa. Una posición que englobe al Ejecutivo, al Legislativo y al Tribunal Constitucional, que recientemente resolvió que la consulta que quiere celebrar Mas es ilegal. Quizá por eso Moncloa ha dado prioridad a la reunión con el próximo líder del PSOE, Pedro Sánchez –al que Rajoy recibirá el lunes 28 de julio–, frente a la del president, que será dos días después. La Generalitat confirmó ayer que Mas viajará a Madrid para hablar de la consulta.
El presidente Mariano Rajoy ha mantenido durante los dos últimos años una excelente interlocución en asuntos de Estado con el secretario general saliente del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba. Rajoy «confía» y «espera» ahora que ese buen nivel de entendimiento se mantenga con Pedro Sánchez, como explicaron ayer fuentes de su entorno a este diario.
La misma noche del domingo 13 de julio, el día de la consulta a la militancia socialista, Rajoy telefoneó a Sánchez, le felicitó y le planteó su intención de recibirle en La Moncloa inmediatamente después de que sea ratificado por el congreso que se celebra este fin de semana. Finalmente, le va a recibir el primer día laborable tras el cónclave socialista: el lunes 28 de julio.
Rajoy tiene pendiente desde antes de esta cita la reunión que mantendrá con el presidente de la Generalitat, Artur Mas. Sin embargo, Presidencia ha preferido modificar la agenda y dar prioridad al encuentro con Sánchez, de forma que la entrevista con Mas sea después: el miércoles 30 de julio.
Fuentes del Ejecutivo restaron trascendencia al baile de fechas y al hecho de que Rajoy reciba primero a Sánchez y después a Mas. De hecho, lo atribuyeron a problemas de agenda. Sin embargo, lo cierto es que la reunión con Mas estaba prevista para celebrarse esta semana. Y el encuentro con Sánchez no se podía celebrar antes de la semana que viene porque hasta entonces no será oficialmente secretario general del PSOE.
Lo que sí confirmaron en Moncloa es que el Ejecutivo quiere mantener una posición firme frente al desafío independentista que no sólo sea una «posición de Gobierno», sino una «posición de Estado» que sea defendida también por el PSOE.
En el Gobierno hay cierta preocupación con la postura que adoptará Sánchez, ya que –apuntan fuentes del Ejecutivo– «la votación del PSOE en el Parlamento Europeo contra Jean-Claude Juncker y en contra de lo pactado no ha sido un buen comienzo».
Sin embargo, las mismas fuentes oficiales esperan que, ante el desafío soberanista catalán, Pedro Sánchez sí pueda apoyar la postura del Ejecutivo. O incluso acordar una postura de firmeza común.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, explicó ayer en Chile que la reunión entre Rajoy y Mas responde a «la voluntad de diálogo y al espíritu constructivo» del Gobierno.
«Dentro de la Constitución y de las leyes, sabe el presidente de la Generalitat que va a encontrar al Gobierno siempre», enfatizó la numero dos del Ejecutivo, en alusión al encuentro entre Rajoy y Mas, informa Efe.
«El presidente Mas sabe de nuestra posición sobre el asunto del referéndum; ésa es muy clara, la conoce, se la hemos dicho siempre; también lo ha hecho el propio Parlamento y el Tribunal Constitucional», recalcó.
La vicepresidenta, que hoy concluye en Santiago una gira oficial de cuatro días por Perú y Chile, hizo estas declaraciones al ser abordada por la prensa a la salida de una reunión con la presidenta chilena, Michelle Bachelet.
«Nosotros también somos gobierno de los catalanes y estamos dispuestos a hablar y a dialogar para que podamos responder a las demandas y necesidades de los ciudadanos de esa comunidad autónoma de la mejor manera posible», subrayó.
Desde el PP, el vicesecretario de Estudios y Programas, Esteban González Pons, alegó de forma clara por que «cuanto más coordinada sea la posición» del PP y del PSOE, «muchísimo mejor». Pons defendió en una entrevista en Onda Cero que «las formaciones que defienden la Constitución y la unidad de España» deben «aunar posiciones», ya que estamos ante un asunto muy grave: «No es un enfrentamiento entre partidos, sino una ruptura de una nación que siempre ha estado unida».
El nuevo líder del PSOE mantiene una posición similar. Como adelantó EL MUNDO el pasado domingo, Sánchez no sólo rechazará en su reunión con Rajoy el referéndum soberanista, sino que ofrecerá al Gobierno de España un pacto para hacer frente de forma conjunta al desafío catalán.
Sánchez quiere que los dos grandes partidos comiencen a negociar una reforma de la Constitución en una ponencia constituida al efecto en el Congreso. Y que el Gobierno y el PSOE acuerden «las líneas rojas» de la reforma constitucional que ambos actores políticos –que representan más del 84% de las Cortes– no están dispuestos a traspasar en esa reforma de la Carta Magna.
Por último, la presidenta del PP de Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho, dijo esperar ayer que la reunión del próximo 30 de julio entre el jefe del Gobierno y el presidente de la Generalitat sea «constructiva» y que en ella se aborden los «auténticos problemas» de los catalanes.
La líder del PPC reclamó a Mas que sea «valiente» y dé marcha atrás en el proceso soberanista que, en su opinión, «no lleva a ninguna parte». Por eso, expresó su confianza en que el presidente catalán coincida con Rajoy en hablar de la lucha contra el paro y de las ayudas a las pequeñas y medianas empresas.
EL MUNDO – 23/07/14