EL MUNDO 11/07/14
· El ‘president’ asegura que ya ha solicitado un encuentro, pero el Gobierno lo niega
Mariano Rajoy se reunirá antes con la principal plataforma ciudadana contraria a la independencia de Cataluña que con el president del Govern. El jefe del Ejecutivo recibirá el lunes a Societat Civil Catalana en La Moncloa para escuchar su mensaje contrario a la secesión.
La organización ya mantuvo un encuentro el pasado 30 de junio con Mas en el que le solicitó que abandonara la idea de convocar una consulta de autodeterminación. Entonces, Societat Civil lamentó que Rajoy todavía no hubiera accedido a mantener un cara a cara para escuchar sus reivindicaciones.
No han sido necesarios más que unos días para que esta reclamación haya sido atendida por el Gobierno, pero mucho más enquistado parece el tira y afloja entre Rajoy y Mas sobre la eventual reunión que ambos tienen pendiente para abordar una solución al órdago catalán.
Ayer se produjo un nuevo cruce de declaraciones entre los dos Ejecutivos del que no salió nada en claro. El elemento central de la discusión es si realmente el presidente de la Generalitat ha solicitado un encuentro con el del Gobierno. Mas aseguró ayer que sí en sede parlamentaria, para ser desmentido sólo unas horas después por la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, quien con su negación devolvió la cuestión a un punto muerto.
Mas se pronunció a instancias de la líder del PP en Cataluña. «¿Ha decidido ya dialogar formalmente con el presidente y sacar a los catalanes de este callejón?», preguntó Alicia Sánchez-Camacho al president en la sesión de control que ayer se celebraba en el Parlament. «El encuentro está pedido», respondió Mas. «Sólo hace falta que me convoquen», abundó. El presidente del Govern dijo «tener la impresión» de que en Moncloa no quieren recibirlo e ironizó: «Ya me gustaría a mí poder convocar al presidente del Gobierno, pero no vendría».
Las palabras de Mas llegaron después de que el miércoles Rajoy le tendiera la mano a Mas desde el Congreso con un explícito: «Si me llama mañana, mañana viene». El presidente del Gobierno respondió así al portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, quien le había instado a aclarar si Mas le había solicitado un encuentro aprovechando la proclamación del Rey Felipe VI. La vicepresidenta subrayó ayer el ofrecimiento. «El día que lo pida, aquí estaremos», redundó Sáenz de Santamaría, después de precisar que el Gobierno no ha recibido «ninguna» petición formal para que Rajoy y Mas se reúnan.
En este matiz, en el de si la solicitud fue formal o no, reside la contradicción entre los discursos de uno y otro Ejecutivo. Mas considera que en la breve conversación que mantuvo con Rajoy durante la proclamación del Rey el pasado 19 de junio ya quedó claro su deseo de acudir a Moncloa. El líder de CiU trasladó al presidente que «estaba a su disposición» y entendió que ese ofrecimiento bastaba. El Govern admitió ayer que no existe una solicitud por escrito, pero restó importancia a esa formalidad.
No opina lo mismo el Gobierno a tenor de las palabras de la vicepresidenta, quien no interpretó el comentario de Mas en la proclamación del Monarca como un requerimiento para discutir en persona el desafío catalán. «Creo que eso ha quedado claro», puntualizó Sáenz de Santamaría.
El entuerto regresa así a la casilla de salida en la que lleva instalado meses. De ella tampoco se ha movido el presidente de la Generalitat. A la espera de comprobar si la reunión con Rajoy cristaliza, Mas reclamó al Gobierno que «no se meta y deje conocer la opinión del pueblo catalán sobre su futuro como nación».
Los movimientos desde Cataluña no sólo proceden del Govern. Ayer, la Fundación Catalunya Societat Civil 2005 –otra plataforma contraria a la secesión– solicitó al PP catalán que reclame a Rajoy abrir «con urgencia» un debate para reformar la Constitución, como única alternativa a la consulta y para resolver los problemas territoriales. En este sentido, reclama que el debate verse sobre las diversas nacionalidades españolas, sobre el sistema de financiación y sobre las competencias autonómicas,