EL CORREO, 24/4/12
El Parlamento vasco reconoció ayer el trabajo de los escoltas pertenecientes a empresas privadas para proteger la vida de las personas amenazadas por ETA. Lo hizo a través de una proposición no de ley planteada por el PSE, que recibió el apoyo unánime de todos los grupos políticos. Ante el cese de la actividad terrorista decretado por la banda, la Cámara reclamó también un plan de reinserción laboral de los guardaespaldas que hasta ahora protegían a cargos públicos y profesionales del sector privado acosados por ETA. Esta votación contó con el sufragio en contra de los nacionalistas.
PSE, PP y UPyD defendieron el trabajo de los agentes de seguridad privados, clave en la «defensa de la democracia y la libertad». Consideraron que merecen un trato específico ante la eventual pérdida de su empleo dado el aparente descenso del riesgo tras el anuncio de ETA. De hecho, diferentes empresas y la propia Administración han empezado ya a reducir el número de escoltados sensiblemente.
Sin embargo, PNV, Aralar, EA y Ezker Anitza-IU rechazaron este plan al considerar que supondría «un agravio comparativo» respecto a otros colectivos. «No podemos hacer distinciones entre personas de primera y segunda clase», afirmó el jeltzale Mikel Martínez.
Dos son las medidas que recoge la iniciativa aprobada para ayudar a los escoltas a encontrar otro trabajo: que los gobiernos central y vasco les faciliten un documento acreditativo de su labor, y que estas mismas administraciones elaboren y ejecuten «un plan específico» para su reciclaje y reinserción laboral.
El segundo punto que salió adelante reconoce el trabajo profesional de la Ertzaintza, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y otras policías en su lucha contra ETA y en la protección de personas. Todos los partidos salvo Aralar votaron a favor, mientras que EA se decantó por la abstención.
El debate se caracterizó por un duro cruce de declaraciones entre Nerea Llanos (PP) y Mikel Martínez. La parlamentaria popular recordó que los primeros escoltas de los cargos de su partido los «tuvo que pagar el PP» porque los gobiernos vascos nacionalistas miraron «durante mucho tiempo» para otro lado. Martínez tachó de «lamentable» que al PP le preocupe más lanzar estas acusaciones que defender el trabajo de los escoltas y replicó que también militantes del PNV han necesitado guardaespaldas y han sido asesinados por ETA.
EL CORREO, 24/4/12