DIARIO VASCO, 8/9/11
Familiares de la exmilitante asesinada por ETA le homenajean en Ordizia. Un pequeño monolito en el lugar donde fue abatida recuerda su lucha por «la libertad» y «por atraverse a discrepar»
El sábado se cumplen 25 años de la muerte de María Dolores González Katarain, ‘Yoyes’, y familiares y amigos de la exmilitante de ETA, que fue asesinada por la misma organización que había dirigido a principios de los 70, le recuerdan estos días en su Ordizia natal. Aquel 10 de septiembre de 1986 en que un etarra descerrajó un tiro en la nuca a ‘Yoyes’ era miércoles, día grande de las concurridas Euskal Jaiak de la localidad del Goierri, por lo que la familia aprovechó ayer la efeméride para colocar un pequeño monolito en el lugar donde fue abatida, una plaza que ayer volvía a mostrar la ebullición propia de un día de fiesta.
La estela está formada por varios tablones de madera unidos sobre los que destacan una fotografía de María Dolores González y una inscripción que dice: «Por atreverse a discrepar y por usar la libertad», en euskera por un lado y en castellano por el otro. Además, también se puede leer un bertso que Xabier Euzkitze le dedicó a ‘Yoyes’ en el décimo aniversario de su asesinato, todo un alegato a favor de la libertad. Varios ramos de flores acompañan a un monolito que ayer ponía la nota trágica en una plaza repleta de ordiziarras que disfrutaban de la fiesta mientras pasaban de un puesto del mercado a otro.
‘Yoyes’ fue asesinada por ETA siete años después de haber dejado la organización armada para iniciar una nueva vida lejos de la violencia. No compartía el rumbo que la organización estaba tomando y se desmarcó de la lucha armada en 1979, lo que provocó duras críticas y acusaciones de ETA y su entorno, que la tildaron de «traidora». Pese a que era consciente de que su vida corría peligro, tras cinco años de exilio en México decidió regresar a Euskadi. María Dolores González no llevaba ni un año viviendo entre Ordizia y San Sebastián cuando un etarra le disparó a bocajarro en el día grande de las Euskal Jaiak de su pueblo natal mientras se encontraba paseando con su hijo de tres años.
El asesinato de ‘Yoyes’ ha sido uno de los atentados más significativos de la historia de ETA. Había sido la primera mujer dirigente de ETA y su muerte la elevó a la categoría de mito. Su asesinato también supuso un punto de inflexión en la repulsa social a ETA, ya que amplios sectores que hasta entonces habían legitimado sus acciones armadas dieron la espalda a la organización tras este atentado.
En el comunicado de ETA militar que justificaba el asesinato de ‘Yoyes’ se aludía a que las medidas de reinserción del Gobierno español buscaban «debilitar» a la organización, aunque María Dolores González nunca llegó a acogerse a dichas medidas de reinserción.
DIARIO VASCO, 8/9/11