Para el presidente de la Fundación para la Libertad, si la negativa del presidente del Gobierno, que según dijo tiene que ser «rotunda y serena», está acompañada de un acuerdo con el partido en la oposición, «favorecerá los intereses de buscar la serenidad en el país, dejará claro a Ibarretxe los límites».
El ex secretario general del PSE-EE y presidente de la Fundación para la Libertad, Nicolás Redondo, consideró hoy en Valencia que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dirá mañana en la Moncloa «rotunadamente que no» a la consulta popular sobre la autodeterminación del País Vasco que propone el lehendakari Juan José Ibarretxe. Además, Redondo indicó que el PP ha de negarse al «unísono, con el mismo tono y con la misma energía» lo que, a su juicio, «nos dará a todos tranquilidad y serenidad»
Redondo realizó estas declaraciones tras la presentación de las jornadas que organiza Fundación para la Libertad en la Universitat de València (UV) con motivo del 30 aniversario de las elecciones democráticas de 1977, y a la que asistieron el conseller de Inmigración y Ciudadanía, Rafael Blasco, y el catedrático de Ciencia Política y de la Administración de la Facultad de Derecho, Pablo Oñate.
Para Redondo, si la negativa del presidente del Gobierno que, según dijo, «no tiene por qué ser histérica» sino «rotunda y serena», está acompañada de un acuerdo con el partido en la oposición «favorecerá los intereses de buscar la serenidad en el país, dejará claro a Ibarretxe los límites», y dirá «a los nacionalistas moderados que el que propone el lehendakari no es el camino, pero que hay que buscarlo». A su juicio, «el camino que ellos proponen sería bien recibido» porque «no comparten la radicalidad y las posiciones extremas de Ibarretxe».
El ex secretario general de los socialistas vascos, que valoró la actividad del Ejecutivo central «en lo que se denomina Estado del Bienestar» donde la gestión ha sido «inmejorable», aseguró que no comparte «lo que se denominó proceso de paz» ya que, según subrayó, es de las personas que «lamentó que fracasara» aunque también «adivinó» que lo haría.
En este sentido, consideró que el PSOE «ha corrido ciertos riesgos» en ese aspecto, que terminaron cuando la formación decidió que en Navarra «gobernara quien tenía que gobernar» y que no hubiera coalición con Nafarroa Bai. Para Redondo, ésta fue una decisión «muy importante en relación con el proceso de paz» que, en su opinión, el PP «no ha puesto suficientemente en valor».
Por otro lado, en relación con las detenciones de la Mesa de Herri Batasuna y las posibilidades de que se pueda ilegalizar Acción Nacionalista Vasca (ANV), han hecho que «se haya vuelto a la estrategia de la derrota de ETA» y que el PSOE y el PP se puedan «poner de acuerdo en esa estrategia». «Están las elecciones cerca», lo que «pueden impedir que nos pongamos de acuerdo pero nos lleva a pensar que el PP y el PSOE están más cerca en la estrategia en la lucha contra ETA».
Asimismo, destacó que el PP «tiene derecho a criticar lo que se hizo» en el proceso de paz, pero según dijo, «tiene la obligación de apoyar al Gobierno en este momento». Redondo aseguró desconocer «si estamos en la época que cultivamos más lo que nos une que la diversidad» pero expuso que «hay muchas cosas que nos hacen fuertes, más libres y más iguales» lo que es «compatible con las autonomías», aseveró. «Lo que no es compatible», según resaltó, «son las naciones dentro de la nación» y lamentó que en el Estatuto catalán no hubiera acuerdo de PP y PSOE.
UPD
Por otra parte, Redondo se refirió al partido Unión Progreso y Democracia, encabezado por la ex socialista Rosa Díaz y el filósofo Fernando Savater. En su opinión, las próximas elecciones se caracterizarán por ser «muy competidas», y por haber una «gran polarización». En este sentido, señaló que existirá un «gran portagonismo del PSOE y el PP, y un protragonismo muy secundario del resto de las fuerzas políticas» lo que «acorta el ámbito de acción política de esta valerosa y corajuda experiencia política».
EUROPA PRESS, 15/10/2007