EL MUNDO – 03/04/16
· Le acusa de hacer «las mismas trampas que Zapatero» y de ayudar a Podemos a gobernar.
«Las mismas trampas que Zapatero». Así de duro se mostró ayer Albert Rivera contra el Gobierno en funciones de Mariano Rajoy, a cuenta del incumplimiento del objetivo del déficit impuesto por Bruselas.
Una crítica demoledora pese a la cual, Rivera insistió en la necesidad de que el presidente del Gobierno se deje de salir «en entrevistas» y forme mesas de trabajo para sentarse con los socialistas y con ellos, tal como le han pedido «cuatro veces». De no hacerlo, le responsabilizó de la posibilidad de que Podemos llegue al Gobierno. Con una aritmética en el Congreso que no sitúa a Ciudadanos como fuerza decisiva, Rivera se presenta a sí mismo como la única garantía «sensata» para conseguir una gran coalición que a Rajoy se le antoja como una quimera y que obligaría a Pedro Sánchez a pactar con los populares.
La aspiración de Ciudadanos es un «Gobierno que no robe y que cuadre las cuentas», frase que provocó los aplausos de un salón de hotel abarrotado en la celebración del primer aniversario de Ciudadanos en Andalucía. Que los números encajen con los deberes impuestos por Bruselas depende, en su opinión, del pinchazo de la burbuja política: «Entre tener manifestaciones de diputados provinciales y senadores y de médicos y maestros, prefiero lo primero», dijo Rivera, que puso cuidado en distinguir entre los recortes en Sanidad y en Educación, y las reformas que deberían acabar con las Diputaciones y un gasto que estiman en 6.000 millones de euros.
«Pero ellos prefieren enfrentarse a los españoles antes que a los suyos», explicó en referencia a la defensa que hace el PP de las diputaciones, y cuya supresión está en el programa de gobierno firmado entre Ciudadanos y el PSOE. Eliminar esos organismos fue lo que más costó en esas negociaciones; «un dolor de muelas» para los socialistas, según reveló. Poner en marcha ese plan reformista depende de la abstención del PP o de Podemos; «una pinza» que, «a día de hoy, no nos deja», se quejó Rivera.
Echarse en brazos de Podemos, con la lupa de Bruselas encima de las cuentas, tampoco es la solución porque un aumento del gasto público llevaría a una intervención y una imposición de más recortes, dijo Rivera: «Nosotros no vamos a disparar el déficit para que nos intervenga Europa» y eso es lo que pasaría con un acuerdo con Podemos.
El Partido Popular como tal apenas apareció en el discurso de Rivera, que se refirió a «algunos», pero sí personalizó mucho en Rajoy, del que según insistió, «su inacción sólo puede traernos a Podemos». Aseguró que en ese caso, estarían en la oposición, porque su partido defiende el euro y la igualdad de los españoles.
EL MUNDO – 03/04/16