Albert Rivera y su equipo ahuyentan un fantasma que les perseguía en las últimas fechas: ser reelegido presidente de Ciudadanos sin unas primarias por falta de candidatos, cuando ha hecho de la democracia interna una de sus banderas. Habrá primarias, disputa. Juan Carlos Bermejo, un afiliado de Las Rozas (Madrid), y Diego de los Santos, militante de Sevilla e hijo del fundador del Partido Andalucista, encabezan dos candidaturas alternativas. Ambos son críticos con el planteamiento y la estrategia emprendida por Rivera.
La Comisión de Garantías validó in extremis –el plazo acababa a las 18.00 horas de ayer– su presencia en la carrera presidencial naranja. La votación telemática será entre mañana y el viernes, aunque la previsión es que Rivera obtenga un amplio respaldo. En todo caso, la celebración de primarias y la presencia de estas candidaturas son bienvenidas por la actual dirección, al ejercer de antídoto contra el hiperliderazgo de Rivera. Permitirán saber el respaldo a su proyecto en cuanto al número de apoyos y al número total de afiliados que se movilizan para votar porque perciban una disputa real.
Bermejo llevaba días postulándose y registró su candidatura en la madrugada del martes, aunque desde Garantías se le comunicó que faltaban requisitos a completar, como el nombre completo de los integrantes –sólo incluía el primer apellido– y las agrupaciones a las que pertenecen sus miembros. Además, debió reemplazar a una integrante de su formación a la que su hijo había dado de baja días antes por error y poner al día en el pago de cuotas a otro miembro.
¿Por qué se presenta Bermejo? «Al leer las ponencias propuestas para la Asamblea del equipo del otro aspirante –en referencia a Rivera– lo que hace es proponer dirigir otro partido que no es Ciudadanos», explicó a este diario Bermejo. Este empresario es afiliado de la formación naranja desde febrero de 2015. «El partido que plantean es otro. Yo quiero recuperar los valores de Movimiento Ciudadano, que se nutre, alimenta y convive con la sociedad civil. Un partido que represente a esa sociedad, a la gente que está harta de la situación actual. Eso no es el Ciudadanos que quiere la otra candidatura».
El otro aspirante en liza, Diego de los Santos, es hijo del histórico fundador del Partido Andalucista, que llegó a ser diputado en el Congreso. Se presentó a las primarias para ser cabeza de lista al Congreso por Sevilla y quedó en quinta posición. ¿Qué propone? «Que la soberanía del partido radique en los afiliados, como proclaman nuestros Estatutos, sin que se menosprecie a las asambleas en ningún ámbito» y que «Ciudadanos se mantenga fiel a sus principios, tanto hacia fuera como hacia dentro del partido», resume. Y añade: «Debemos ser consecuentes en nuestros pactos».
Ayer, Rivera, tras hacerse oficial que tendrá dos rivales en la carrera para presidir Ciudadanos, deseó «suerte a los otros candidatos: que gane el mejor».