EL MUNDO – 04/02/17
· El partido afronta hoy su Asamblea, que decide su estrategia, ideario y órganos de control.
· El madrileño municipio de Coslada será, desde este fin de semana, parte de la historia de Ciudadanos.
Aquí, la formación naranja traza un punto y aparte en su recorrido. Los nuevos documentos sobre ideario, estrategia política y estatutos marcarán las directrices inmediatas a seguir. Pero, en un segundo plano, se libra también una batalla por el control del partido. La Asamblea, la primera que se celebra en cinco años, servirá para elegir el nuevo consejo general, el máximo órgano de representación del partido entre Asambleas. La dirección de Albert Rivera presentará una lista para que los miembros de esta candidatura oficial copen este órgano. Los compromisarios no oficialistas están intentando organizarse para presentar una alternativa.
El Consejo General es un órgano importante en Ciudadanos. Controla a la Ejecutiva; elabora, encarga, recibe, debate y en su caso aprueba informes, propuestas y proyectos sobre la organización, estrategia, ideario y programas; aprueba la participación en procesos electorales; y da el visto bueno a los presupuestos, el informe de gestión y el documento de estrategia política que presentará anualmente la Ejecutiva.
El Consejo General no se renueva desde 2011, por lo que hasta ahora su composición era netamente catalana, resultante de la época en la que el partido era autonómico y no nacional. Consejeros con años de militancia, veteranos del partido y, muchos de ellos molestos con el giro ideológico –abandonar la socialdemocracia– que propone la dirección de Rivera en esta Asamblea.
La composición actual era de 59 miembros. Ahora, con los nuevos estatutos, la cifra se eleva a 125. Puede presentarse cualquiera de los 570 compromisarios que acudirá a la Asamblea, menos los miembros de la nueva Ejecutiva de Rivera. Éstos tendrán 20 representantes en el órgano, al margen de los 125 electos. También ocuparán silla los portavoces autonómicos.
La elección del Consejo General se realizará el domingo. Las candidaturas podrán ser individuales o agrupadas –la Ejecutiva ha decidido elaborar una agrupada– y se votarán en listas abiertas, desbloqueadas. Será de manera similar a como se elige a los miembros del Senado: en la papeleta –que se imprimirá sobre la marcha durante la Asamblea– se podrán señalar a los candidatos que se desee, estén en una candidatura u otra o vayan por libre. Cada compromisario podrá votar a 125 miembros.
Fuentes de la dirección confirmaron su intención de presentar una lista oficial, aunque no facilitan el número de miembros de la misma. Toda vez que la lista de Rivera logró 335 compromisarios de un total de 479 electos. A ellos hay que sumar la treintena de miembros de la Ejecutiva. Esta mayoría de delegados hace presuponer que la candidatura oficial no tendrá aparentes problemas para lograr sus objetivos.
A última hora de ayer, los compromisarios no oficialistas intentaban organizarse para presentar una propuesta alternativa. Sin embargo, muchos de ellos aún presentaban dudas sobre si dar o no el paso y preferían esperar a ver qué sucede este sábado, con el debate de las enmiendas y la aprobación de los documentos definitivos. Palpar el ambiente para tomar una decisión.
Durante esta Asamblea también se elegirán a los miembros de la Comisión de Garantías, el tribunal interno del partido. En los últimos años, sus nombres no han sido proporcionados de manera pública por el partido y constaba de siete miembros y no nueve como marcan los estatutos. Su actuación ha sido puesta en tela de juicio por el sector crítico del partido, acusándola de partidista. El informe de gestión de este órgano, que se presentará hoy en la Asamblea, revela que rechazó el 91,8% de los recursos planteados desde 2012 por afiliados afectados por expedientes disciplinarios, y sólo se atendieron cinco de los 61 presentados.
POLÉMICO INFORME DE LA EJECUTIVA
16 páginas. La Asamblea debe votar el informe de gestión de la Ejecutiva de los últimos cinco años. Se trata de un texto de 16 diapositivas con datos de crecimiento de cargos públicos, agrupaciones, presencia en redes sociales o balance económico. Flechas y barras. Pero no recoge ninguna reflexión sobre estrategia y decisiones políticas.
Malestar. Este informe, que fue recibido por los compromisarios esta semana, aunque con retraso, ha causado asombro y malestar entre los asistentes a la Asamblea. «Me siento insultado», dice un compromisario a este diario. «Increíble», «Birria» o «De risa» son algunos adjetivos de casi una decena de consejeros consultados por este periódico.
EL MUNDO – 04/02/17