EL CORREO,11/9/11
El dirigente de la izquierda abertzale cree que la banda debe dar nuevos pasos, «aunque el proceso no puede ser unilateral», y aboga por hablar con el PP
El dirigente de la izquierda abertzale Rufi Etxeberria dice no albergar «ninguna duda de que ETA ha decidido dejarlo», en alusión al final de la violencia. Este guipuzcoano de Oiartzun, persona destacada del proceso emprendido por la antigua Batasuna a favor de las vías exclusivamente políticas e institucionales, afirma que ya se dan las «condiciones suficientes» para «buscar la solución al conflicto», una vez que ETA «ha manifestado su disposición clara a superar definitivamente el ciclo de la lucha armada. Pero esto tiene que estar acompañado por las medidas que superen las consecuencias de tal situación y cierren cuestiones relativas a presos, refugiados, a su militancia y a la desmilitarización».
«El PP se ha quedado desnudo. Es cuestión de tiempo que atienda las interpelaciones de la izquierda abertzale»
Según Etxeberria explica en una entrevista que hoy publica ‘El Diario Vasco’, vincular un nuevo movimiento de la banda a ese tipo de medidas no representa la existencia de condicionantes. «No los hay. Las resoluciones de ETA las situamos en un estadio que no tiene vuelta atrás, que es irreversible. Hay que entenderlas como las partes de un proceso de cierre definitivo del ciclo armado», apostilla, antes de precisar: «El conflicto político vasco es un problema de Estado. Estamos de acuerdo en que la paz no debe tener precio político, pero tampoco las legalizaciones o la política penitenciaria deberían estar sujetas a la arbitrariedad política».
El dirigente independentista se muestra convencido de que la autorización por parte del Gobierno a crear una comisión de verificación del alto el fuego e iniciativas como legalizar a Sortu o revisar la política penitenciaria ayudarían a que la organización terrorista tomara «nuevas decisiones y pronunciamientos». «Las posiciones nuevas que pudiera desarrollar estarían en correspondencia con las decisiones que ha hecho públicas hasta el momento. No hay duda de que ETA debe acompañar un proceso de soluciones, pero los procesos no se construyen de forma unilateral sino bilateral o multilateral», advierte.
La intención inmediata de la izquierda abertzale pasa por continuar desarrollando iniciativas con el Acuerdo de Gernika «como norte», ya que entiende que «la resolución del conflicto no debe estar sujeta a avatares electorales. Hay una urgencia social». Tampoco está de acuerdo con quienes, desde otros partidos, perciben una involución en la antigua Batasuna desde las elecciones de mayo con respecto a las tajantes declaraciones contra la violencia que hicieron durante la constitución de Bildu y, antes, en la presentación de Sortu. «La izquierda abertzale adoptó en su día una posición clara de que la lucha por la independencia sólo se debe desarrollar por vías políticas y democráticas, de que ya no ha lugar a la lucha armada, y está en esa posición, ni más adelante ni más atrás. Y entendemos que ETA ha resuelto internamente, y así lo ha hecho público, hacer suya esta decisión adoptada en asambleas con participación de siete mil personas».
Etxeberria opina que la postura de la banda no hace temer una escisión interna en sus filas. Es más, afirma que la izquierda abertzale «va a trabajar denodadamente para que no se dé una situación de esas porque sería uno de los peores escenarios». E insiste, rotundo, en que «no tenemos ninguna duda» de que la mayoría de ETA ha decidido dejar la violencia.
Respecto a la situación política que resulte de las próximas elecciones generales, el histórico militante abertzale no se decanta sobre la influencia que un Gobierno del PP tendría en el proceso de pacificación. «El conflicto vasco, que es anterior a ETA, no es un problema de un Gobierno de un color u otro. Es una cuestión de Estado, que tiene que acometer una segunda Transición reconociendo el derecho de las nacionalidades históricas vasca, catalana y gallega a decidir su futuro». En cualquier caso, sí matiza que el Partido Popular «ha actuado con desprecio ante las iniciativas de la izquierda abertzale y con menosprecio ante las decisiones de ETA. Pero se ha quedado desnudo porque la sociedad percibe con nitidez que no existe violencia. En el País Vasco, el PP es consciente de que su discurso no tiene entronque social y sabe que si no da un viraje va a ir a la minorización política».
La foto donostiarra
Etxeberria asegura detectar ese viraje en los populares que dirige Antonio Basagoiti. «Sí. En la fotografía de Donostia (el saludo del alcalde de Bildu y el portavoz del PP en las fiestas de la ciudad) hay un fondo que comparte la sociedad vasca, el de las ansias de construir bases de convivencia democrática y que cada cual defienda su proyecto», subraya el dirigente independentista, para quien «el PP tiene que ser parte de la solución. Queremos entablar relación con el PP para compartir análisis y desarrollar trabajos conjuntos».
Aunque admite que aún no han abierto esas vías con los populares, sí «hemos trasladado públicamente esa actitud y no hemos encontrado una respuesta positiva para mantener encuentros ni entablar dinámicas de acción conjunta. Pero va a ser cuestión de tiempo que el PP atienda positivamente a las interpelaciones de la izquierda abertzale».
EL CORREO,11/9/11