EL CONFIDENCIAL 02/02/17
Soraya Sáenz de Santamaría e Inés Arrimadas se reunieron en la tarde de este miércoles en el Congreso de los Diputados para abordar la situación política en Cataluña tras la petición de la portavoz de Ciudadanos en el Parlament, cuando Carles Puigdemont decidió no acudir a la Conferencia de Presidentes del pasado día 17. “Ya que no viene el presidente y deja la silla de los catalanes vacía, venimos nosotros”, afirmó la dirigente de centro acompañada por los diputados José Manuel Villegas y Toni Roldán.
El grueso de la conversación no abordó el hipotético referéndum -que la Generalitat podría intentar convocar antes de verano-, “esperemos que el Gobierno catalán no llegue a eso”, insistió Arrimadas, sino que estuvo centrado en las “prioridades que tienen los catalanes” y que en palabras de la portavoz nacional de Ciudadanos son la reforma del sistema de financiación autonómica y la necesidad de estructuras estratégicas, especialmente el Corredor Mediterráneo. Aún así, Arrimadas confirmó que sobre en referéndum “la posición con el Gobierno es muy parecida”, sobre todo en que “los políticos no pueden saltarse las leyes” y en que “Cataluña no necesita un Brexit”.
En encuentro, en el que también estuvo Roberto Bermúdez de Castro -secretario de Estado para las Administraciones Territoriales y ‘hombre fuerte’ de Soraya- tuvo lugar poco después de que la vicepresidenta se reuniera con Alicia Sánchez-Camacho y Andrea Levy en representación del PP catalán. En todo caso, Bermúdez de Castro -que también compareció al finalizar- confió en que el Govern “no forzará la máquina” en la convocatoria del hipotético referéndum, en linea con Arrimadas, que insistió en que en la reunión no se “concretaron medidas específicas” para frenar la consulta porque no cree que la Generalitat “vuelva a cometer el mismo error del 9-N”. El portavoz del PP tras la reunión confirmó que a día de hoy “el Gobierno puede confirmar que el referéndum no se celebrará”, aunque evitó pronunciarse sobre si el Ejecutivo tiene garantías de que las urnas no se pondrán en los colegios.
A propósito de ello, la portavoz nacional de Ciudadanos sí pidió amparo al Gobierno para proteger a los funcionarios si el Govern insistiera en que los centros educativos se abran para celebrar una consulta inconstitucional: «No podemos consentir que los funcionarios reciban presiones».
“Nuestra responsabilidad es venir”
Arrimadas reiteró que la actitud de su partido “es manifiestamente distinta” a la del Govern en tanto a que ella no viene “a pedir independencias” sino a “defender mejores servicios e infraestructuras para los catalanes”. La presidenta del grupo parlamentario de Ciudadanos en el Parlament ‘sacó pecho’ por liderar la oposición en Cataluña y en clave electoral -mientras aumentan los rumores de que podría haber finalmente un adelanto de comicios en la región- afirmó que la suya “es una alternativa política que trabaja desde el sentido común”.
Aún así, la dirigente de centro evitó pronunciarse sobre posibles alianzas si efectivamente hubiera nuevas elecciones en Cataluña e insistió en que su “responsabilidad” era venir al Congreso a reunirse con el Gobierno “para dar voz a los catalanes” y mantener un “contacto constante” con el resto de fuerzas.