Manu Torralba-Vozpópuli
- En la tarde del domingo la Coalición de los Dispuestos se reúne por videoconferencia… con la ausencia del presidente del Gobierno español
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha confirmado este domingo que viajará a Estados Unidos el lunes junto a otros líderes europeos para arropar a Volodímir Zelenski, que se encuentra ante un gran escollo después de la reunión del viernes en Alaska entre el presidente Trump y su homólogo ruso Vladimir Putin. Tanto a esta cumbre en Washington DC como en la videoconferencia que ha tenido lugar esta tarde, el que estará y ha estado ausente es Pedro Sánchez, que tras su comportamiento con la OTAN y su acercamento a China, queda ahora condenado a una irrelevancia internacional.
«Esta tarde daré la bienvenida a Zelenski en Bruselas», ha comentado Von der Leyen en un mensaje en Twitter. «Juntos participaremos en la Coalición de los Dispuestos«, ha comentado en redes sociales, anunciando la reunión que mantendrá con otros líderes europeos en el marco de esta negociación por la paz de Ucrania y la cesión del Donbás en la que no está el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.
Tanto Ursula Von der Leyen y como Volodimir Zelenski participarán este domingo desde Bruselas. Al otro lado de la videoconferencia, los países aliados de Ucrania entre los que no se encontrará España. El nombre por el que se autodenomina este grupo es la Coalición de Voluntarios o Coalición de los Dispuestos, como ha dicho la presidenta de la Comisión en su mensaje en X, anteriormente conocida como la red social Twitter.
«A petición del presidente Zelenski, mañana me uniré a la reunión con el presidente Trump y otros líderes europeos en la Casa Blanca«, ha asegurado la presidenta europea en redes sociales.
Una foto de familia y un 5%
Sánchez compareció desde La Moncloa para anunciar que España había alcanzado un acuerdo con la OTAN. Según él, se limitaría a destinar un 2,1% del PIB a Defensa, muy lejos del 5% que perseguía la Alianza. Solo tres días después tuvo lugar la recordada foto de familia en la que el presidente del Gobierno español decidió dar un paso a un lado y descolgarse del resto de líderes que se daban cita en la cumbre de la OTAN en junio, tras haber recibido críticas de Italia, Dinamarca y Estados Unidos, entre otros.
A la reunión llegaron todos con una inversión mínima del 2% para esta partida, incluida España, aunque lo logró en el último momento. Pero ese no era el techo de gasto, sino el punto de partida para una ardua negociación.
Un escenario aciago para Europa
La situación actual es aciaga, después de que el estadounidense pusiese las esperanzas en todo lo alto minutos antes de aterrizar en la base militar de Anchorage (Alaska): «Quiero ver un ato el fuego», decía el estadounidense a bordo del avión presidencial. Todo invitaba a ser optimistas, incluido el cálido ambiente de bienvenida que se le hizo a Putin en un escenario que tan hostil le fue a Rusia durante la Segunda Guerra Mundial. Las sonrisas, los aplausos entre ambos, la cordialidad… todo apuntaba en la misma dirección hasta que comparecieron en una rueda de prensa sin preguntas tres horas después: no llegaron a un acuerdo para el alto al fuego. Al revés. Putin se cerró en banda: solo la cesión del Donbás podría hacer terminar esta guerra. Y sobre eso tratarán este lunes Zelenski y el magnate estadounidense.