EL MUNDO – 21/06/16
· El PSOE lanza una ofensiva final para ganar entre 400.000 y 900.000 votos hasta el domingo.
· El PSOE quiere echar el resto esta semana, remontar las encuestas, convencer a los indecisos y avanzar al máximo en intención de voto para evitar el sorpasso de Unidos Podemos y dejarlo lo más atrás posible.
Para ello, en estos últimos días pondrá en marcha una «gran campaña de movilización» para convencer a los indecisos y a los votantes decepcionados con Podemos. Además, los socialistas se empeñarán en «desenmascarar» la candidatura de Pablo Iglesias, ya que consideran que tras su aparente socialdemocracia propone «trocear la soberanía nacional» y «pone en riesgo la viabilidad económica de España y del Estado del Bienestar».
Ayer por la mañana, Pedro Sánchez lo dijo claramente en una entrevista en Onda Cero. Sus líneas rojas para negociar un pacto de gobierno son tres. La primera, que en ningún caso apoyará a Mariano Rajoy o a otro candidato del PP. La segunda, que no alcanzará un acuerdo de gobierno que incluya «fragmentar la soberanía nacional», como propone Podemos. Y la tercera, que no se «ponga en riesgo la viabilidad económica del país o el Estado del Bienestar». En opinión de Sánchez, la coalición Podemos-IU «no cumple» con las dos últimas condiciones.
Sánchez dijo que volverá a intentar gobernar con Podemos y Ciudadanos y se mostró abierto a tener ministros de ambos. Pero sólo si Podemos renuncia a defender el derecho de autodeterminación desde el Ejecutivo. «Si triunfan las tesis más duras de Podemos, las de Iglesias y Monedero, será imposible. Pero si el PSOE sale fuerte y gana las elecciones, aquellos que dijeron no se verán obligados a decir sí», argumentó.
Tras insistir en que no va a «apoyar al Gobierno del PP», el líder del PSOE aseguró también que su partido no hará presidente a Iglesias.
En esta última semana, el PSOE aspira a llegar directamente al máximo número de personas. Por eso, en el sótano de la sede socialista se han instalado 90 puestos de teleoperador desde los que voluntarios, en dos turnos, van a realizar medio millón de llamadas hasta el viernes.
Los socialistas creen que con esta campaña y otras paralelas pueden mover entre dos y tres puntos de intención de voto a su favor. Cada punto, y dependiendo de la participación, puede suponer entre 200.000 y 300.000 electores. La ofensiva socialista tratará de convencer, por tanto, a una franja de entre 400.000 y 900.000 personas.
El PSOE tiene el mapa español estudiado en sus 36.000 secciones electorales. Las hay del PP o bastiones de los nacionalistas, pero no se centrarán en esos barrios. Las llamadas se dirigirán a 9.800 secciones «prioritarias». En ellas hay millones de votantes del PSOE que el 20-D no votaron o lo hicieron a Podemos.
Además, el PSOE repartirá hasta el viernes 10 millones de folletos en toda España, puerta a puerta o por la calle, y hará 1.300 actos en las 50 provincias. El candidato del PSOE intensificará su agenda. Y lo mismo harán los siete presidentes autonómicos y los miles de alcaldes del partido. En total, el PSOE quiere llegar directamente a 600.000 hogares.
EL MUNDO – 21/06/16