ABC 15/06/17
· CAMBIO DE ESTILO
Debutaba José Luis Ábalos como portavoz (provisional) del PSOE en el Congreso y su intervención gustó mucho entre sus filas. Especialmente cuando Pablo Iglesias alabó sus formas y su discurso, en contraposición con sus antecesores. «Puedo discrepar mucho con mis compañeros, pero son mis compañeros y no me gusta que alguien valore o enjuicie la actitud de mis compañeros», le respondió Ábalos.
El que está llamado a ser secretario de Organización del PSOE aprovechó la circunstancia para unir a un grupo parlamentario que ha vivido meses de profunda división. Diferentes diputados consultados, que apoyaron tanto a Sánchez como a Susana Díaz, valoraron muy positivamente su intervención. Y explican que cuando ha señalado que «a lo mejor a veces abstenerse no es tan grave» se refería al hecho de que una abstención de Podemos en marzo de 2016 habría hecho presidente a Sánchez. «Ha estado fenomenal», resumía un diputado. Su mano tendida a Podemos para construir acuerdos en el futuro no pecó de renunciar a ideas básicas: criticó a Iglesias por no haber apoyado a Sánchez, se separó de Podemos con una viva defensa de la Transición y en lo referente a la cuestión territorial fue claro: «No entendemos España sin Cataluña y Cataluña sin España y lo reafirmaremos las veces que haga falta».
Y aunque criticó a Cs por sostener al PP en algunas autonomías, no abjuró de su pacto pasado ni lo descartó como socio futuro. No pasó desapercibido para algunos miembros de Podemos que ven por ello «más cambio formal que de fondo» en el PSOE. Pero en cualquier caso perciben «signos positivos» en el nuevo PSOE.