Hay gente en el periodismo que más que mostrar quiere demostrar, que no se conforma con enseñar la verdad, sino que además quiere demostrar que es buena gente, que tiene buenos sentimientos. O que es implacable en el trato a la mala gente. Una de ellas es Silvia Cuartel de Intxaurrondo, también llamada ‘Half a Million Dollar Baby’ por la nómina. , una tía que es granito cuando entrevista a alguien de derechas y una sumisa geisha cuando tiene delante a alguien de izquierdas. Una prueba elemental para todo sexador de tontos es si sobrevalora a esta señora. Yo la descubrí hace años en ETB cuando en compañía de otros tres entrevistó a Fernando Grande Marlasca, que era por entonces un juez muy prestigiado.
No tenía otro interés que preguntar a aquel hombre por su condición sexual, hasta el punto de que en un momento dado preguntó: “¿Pero es que me van a interrogar ustedes a mí?” Bueno, pues ella va y propone la creación de un nuevo delito además de la calumnia, que es el delito de mentir: el pasado 24 de abril decía: “La mujer del presidente del Gobierno no está imputada y la pareja de Ayuso sí.”. Ella propone: “igual hay que ir delante de un juez. Voy a desarrollar el argumento. Uno va delante de un juez y le dice, han publicado esto, y esto es mentira. Pues un juez multa a ese medio de comunicación, y si la multa es cuantiosa, yo sospecho que se le van a quitar las ganas de seguir. A ese y a todos los demás. Yo no estoy hablando de calumnias, yo estoy hablando de mentira. Porque muchas veces se puede calumniar tergiversando la información. Pero la mentira es un hecho objetivo. Eso sería desmotivador para los bulos”.
Una salvedad: Begoña Gómez había sido imputada por el juez Peinado ocho días antes, el 16 de abril. ¿Qué multa cree esta bienpagá que merece por su bulo?
Belisario comentaba en mi blog la extorsión a Edmundo González ¡en la embajada española!: Delcy se maneja por nuestra embajada con la misma soltura que en Barajas. Quien manda, manda. Hay que matizar, de todas maneras: no lo torturaron en la sede diplomática y mucho menos en presencia de nuestro embajador. Y no tenían allí a sus rehenes, los familiaros del presidente electo.
Parmenio: Para sorpresa de nadie, la heroica mediación humanitaria de Zapatero consistió en llevar a Edmundo González a una encerrona en la Embajada de España en Caracas para que los hermanos Rodríguez pudieran extorsionarle con una oferta que no pudiera rechazar. En esta vida hay pocas cosas en las que se pueda confiar, una de ellas es que de Zapatero no puede salir nada decente o digno. Es basura. Siempre lo fue.
Pedro Sánchez intervenía en el Congreso para soltar tres mentiras más: Que hasta Teresa Ribera nunca una española había tenido competencias en la vicepresidencia de la Comisión Europea, que en los ocho meses de este año se han aprobado 12 leyes cuando en realidad solo han sido dos y que el INE revisa al alza las cifras del crecimiento de 2022 y 2023. Tres mentiras: La primera mujer española en llegar a vicepresidenta de la Unión Europea fue Loyola de Palacio hace 25 años. No ha sido el INE, quien ha predicho el crecimiento, ha sido Tezanos.
Y hablando de Tezanos, el CIS en el primer barómetro del curso, en plena polémica por el cupo catalán y la presunta corrupción de la mujer y el hermano de Pedro Sánchez, sitúa al PSOE como primera opción con una estimación de voto del 33%, 4,5 puntos por encima del PP, que retrocede y quedaría en el 28,5%. Decía la víspera Félix Bolaños que algunas encuestas no pretenden explicar la voluntad de los ciudadanos sino influir en su voto. Amén.
María Jamardo explicaba la incongruencia: “Si el PSOE lleva 4,5 puntos de ventaja al PP, ¿Cómo es que Sánchez no convoca elecciones? ¿Por qué conformarse con tres años como rehén de los separatistas y partidos minoritarios, en lugar de optar a cuatro más en solitario?
Miguel Angel H. C. dijo:Hay que congratularse de que, todavía, defender y alabar la corona, la iglesia y por supuesto la Constitución no sea perseguido como delito de odio.
Tengo una duda: ¿se despenalizarán las posibles injurias al papa Francisco como parte de la despenalización de las injurias a la Iglesia o entrarán en los delitos de odio?
Gulliver publica en mi blog una décima admitiendo que le ha pillado por sorpresa que el Gran Jefe llame «Pichona» a Begoña. Transcribe una recreación libre de las reflexiones del navarro Santos Cerdán sobre este asunto:
El Gran Jefe está enfadado,
hay que ver cómo se ha puesto:
¡tendrás que acabar con esto
si no quieres ser cesado!
¡Como sea -me ha gritado-
o te vuelves a Pamplona!
Que aunque fundraising gestiona
mi Bego corrupta no es,
sólo admito que es pichona.