Tonia Etxarri, EL CORREO 21/11/12
La nueva presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejería, elegida con los votos de su partido, el PNV, tendrá un apoyo institucional más firme, sin duda, que el que recibió su antecesora , la popular Arantza Quiroga, cuando se puso en marcha la legislatura del socialista Patxi López. Porque Arantza Quiroga, con los deberes pasados a limpio, ha realizado un traspaso de poderes impecable, con la intención de facilitar el camino a su sucesora en el cargo, independientemente de la ideología que les separa, por el bien de la institución. Como debe ser. Y como no le ocurrió a ella, que ingenuamente pensó,que ante cualquier duda que se le presentase, encontraría, en el «pendrive» que le había entregado su antecesora, Izaskun Bilbao(PNV), las respuestas necesarias. Su sorpresa fue indescriptible , y su indignación sobrellevada de la forma más discreta posible, cuando procedió a la lectura de la memoria ,con la intención de recabar detalles sobre la preparación de la conferencia de presidentes regionales de Europa y se encontró , nada menos, que con una lista de canciones de Julio Iglesias. Como lo están leyendo. Ese fue el traspaso de poderes que hizo la presidenta del Parlamento del mandato de Ibarretxe a la presidenta de la Cámara de la legislatura de Patxi Lopez. «La vida sigue igual» como prenda de recuerdo. Con el paso del tiempo y ahora que se inicia la décima legislatura vasca en la que el PNV vuelve a tomar las riendas del gobierno, el conocimiento de este detalle tan «chusco» pierde fuerza pero no caducidad para entender el trato despectivo que recibieron, en su día, los anteriores gobernantes constitucionalistas por parte de un partido que no ocultaba su despecho por no haber podido gobernar en Ajuria enea, a pesar de haber ganado las elecciones en el 2009.
A la nueva presidenta del Parlamento no le han hecho un feo similar quienes le han pasado el testigo . Las buenas formas y el respeto institucional se aprende en la joven escuela de la democracia . Con mucha perseverancia y mejor voluntad. Bakartxo Tejeria, además, tendrá un mandato más tranquilo, sin estar sometido a la presión de un terrorismo activo. Una tranquilidad que se verá contrarrestada, sin embargo, con la tensión que sin duda aportarán los herederos de Batasuna empeñados en diluir la historia real de ETA en un difuso conflicto en el que han sufrido por igual, víctimas que victimarios. Ayer Bakartxo Tejería hizo una alusión a las bases «de La Paz y la convivencia» y ése, sin duda, va a ser un punto de colisión , teniendo en cuenta que hace tan sólo unos días sus señorías fueron incapaces de rendir un homenaje unitario a las víctimas en el Día de la Memoria porque las diferencias que mantienen sobre el perfil de los destinatarios se presumen, hoy por hoy, insalvables. Que ayer la representante de EHBildu, Laura Mintegi, llamara la atención a Isabel Celaa porque, en su inesperado discurso como presidenta de la Mesa de edad, se había olvidado de citar a Santi Brouard en la mención de parlamentarios asesinados, indica que en nuestro Parlamento, además de la crisis y los debates identitarios, se centrará el foco en la batalla de la memoria.
Tonia Etxarri, EL CORREO 21/11/12