EL CORREO 13/07/14
· Rufi Etxeberria reconoce esos contactos «de verano a invierno» del año pasado y reclama a los jeltzales celebrar nuevas reuniones
Rufi Etxeberria, portavoz de Sortu, volvió a dejar claro ayer que la situación de los presos se ha convertido en una cuestión primordial para la izquierda abertzale. «Hay que buscarles una salida urgente porque sus derechos son erosionados cada día por el Gobierno del PP, que no cumple la ley», aseguró en una entrevista concedida a Euskadi Irratia. Consciente de que los gobiernos de Madrid y París hacen oídos sordos a su petición de llevar a cabo un cambio en la política penitenciaria, las miras de la formación soberanista vuelven a girar hacia el PNV y el Gobierno vasco.
Etxeberria emplazó a la formación jeltzale y al Ejecutivo de Iñigo Urkullu a renovar las conversaciones mantenidas «durante largos meses, de verano a invierno» del pasado año sobre la necesidad de configurar un plan conjunto para los presos y reclamar la política penitenciaria para Euskadi. Aquellos contactos, secretos hasta ayer, no llegaron a buen puerto porque no se logró «marcar una senda por la que profundizar». Sin embargo, el camino quedó abierto y la izquierda abertzale cree necesario recuperar esos pasos dados. «No se alcanzó un acuerdo a la hora de plasmar los compromisos, pero creemos que existen posibilidades de trabajar juntos porque las dos partes hicimos una lectura similar del problema. El camino que ya hemos recorrido es válido, no se ha quedado viejo y estamos dispuestos a reemprenderlo», manifestó Etxeberria.
Frente común
Sortu busca recuperar la entente que permitió que en enero jeltzales y abertzales caminaran juntos por las calles de Bilbao «en una gran movilización», sostuvo el responsable para la resolución del conflicto del partido independentista. «Desde entonces hemos realizado muchos intentos para conformar un frente común, pero ellos no han mostrado disposición para adquirir compromisos», añadió.
El dirigente guipuzcoano criticó, en este sentido, que «en los últimos diez días, con sus manifestaciones, el PNV ha evidenciado un paso atrás evidente y hemos tenido que salir al paso de forma contundente, porque se han dicho muchas mentiras».
Los puntos que deben labrarse en esas hipotéticas conversaciones con el PNV son los mismos que han surgido de los diferentes foros celebrados en los dos últimos años sobre los reclusos de ETA. Los pasos dados son «muy importantes» y han dejado «claro», según Etxeberria, que la solución del problema debe basarte en «tres requisitos»: «reunir a los presos en el cárcel alavesa de Zaballa, que el Gobierno vasco consiga las competencias penitenciarias y que se configure un programa de excarcelación que tenga en cuenta la voz de los propios reclusos».