EL CORREO 09/03/13
Ugarteburu afirma que la ruptura del «escenario estable de diálogo» de Oslo aboca a entablar conversaciones con la ayuda de mediadores internacionales
La expulsión de Noruega de los tres dirigentes de ETA –‘Josu Ternera’, David Plá e Iratxe Sorzabal– que desde hace ocho meses permanecían en el país escandinavo para intentar crear un foro de negociaciones con los estados español y francés, y las recientes palabras del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que aseguraban que «términos como proceso de paz no entran en la dialéctica del Gobierno de Mariano Rajoy», parecen haber convencido ya a la izquierda abertzale de que cualquier diálogo directo entre la banda terrorista y las autoridades de Madrid y París parece imposible.
Por ello, la vía que ahora proponen Sortu y EH Bildu se encamina a intentar llevar a cabo negociaciones a través de terceras personas, prioritariamente del ámbito internacional, según dejó entrever ayer la parlamentaria vasca de la coalición abertzale Maribi Ugarteburu. La vizcaína señaló en una entrevista radiofónica que «cualquier proceso de resolución definitiva y de construcción de un escenario de paz real para todos» quizá pueda llegar por medio de una intermediación de personas que han trabajado en «conflictos en los cinco continentes, endiablados y terriblemente cruentos. Mucho más complicados que los que hemos conocido aquí, elevados a la enésima potencia».
Esos «elementos facilitadores, mediadores, llámense como quieran», en opinión de Ugarteburu, deben «ordenar el proceso abocado a la disolución de todas las estructuras militares de ETA». «Hay que abordar el desarme, directamente o a través de terceros», una vez que «presiones políticas e informaciones que carecían de fundamento alguno» hayan provocado «la ruptura del escenario estable para el diálogo para la parte técnica de Oslo» y creado «distorsiones en la agenda resolutiva», dijo la líder de Sortu en Bizkaia.
«Mínimas garantías»
Cuando ya han pasado diecisiete meses desde que el 20 de octubre de 2011 ETA cesó «definitivamente su actividad», Ugarteburu calificó de «triste» que mediadores de otros países deban recordar al Gobierno que ya hay «unas mínimas garantías encima de la mesa» para poder negociar. Los expertos foráneos, en su opinión, han detectado un Ejecutivo que apuesta «por el bloqueo, por intentar de todas las maneras obstaculizar, dificultar esa resolución porque no le conviene políticamente y no tiene una oferta democrática» para el «pueblo de Euskal Herria».
La dirigente abertzale quiso recordar asimismo que ETA «ha reiterado en más de una ocasión, y no ha dejado de hacerlo, que su voluntad es proseguir en ese camino y que dará pasos para ello». Mientras, «la otra parte utiliza todo tipo de presiones políticas, diplomáticas, mediáticas, tanto aquí como a nivel internacional, para impedir que llegue ese momento de diálogo, de la ordenación de todas estas cuestiones y de tener que llegar a hablar, simplemente», finalizó.