La tensión entre la Comisión Gestora del PSOE y la candidatura de Pedro Sánchez sigue creciendo. Esta semana, el equipo del ex secretario general ha puesto en duda la gestión del censo por parte de Ferraz y ha denunciado la paralización de altas en algunas provincias. La candidatura sanchista ha reclamado que se permita el voto telemático –como en la consulta sobre el acuerdo de gobierno con Ciudadanos– y ayer rechazó, a priori y a falta de sentarse con la Gestora, el sistema que la dirección provisional del PSOE propone para controlar su financiación. Todos estos encontronazos se pondrán sobre la mesa el martes, cuando está prevista una reunión entre la Gestora y las candidaturas.
La Gestora quiere controlar las cuentas de los candidatos a liderar el partido desde ya. Por eso, el martes propuso a las tres candidaturas –las de Susana Díaz, Pedro Sánchez y Patxi López– unas reglas de financiación según las cuales Ferraz comparte la titularidad de dos cuentas con cada equipo: una para recoger fondos y otra para gastos.
Mientras la propuesta llegaba a las candidaturas de Sánchez y López, con la de Susana Díaz hubo acuerdo inmediato. La cuenta de ingreso del PSOE para la candidatura de la presidenta de la Junta de Andalucía quedó abierta el mismo miércoles. Ese día, empezó a circular en miles de SMS el número de «una cuenta corriente habilitada por el PSOE»; en el mensaje se afirma que las donaciones «tienen una deducción fiscal del 30%». Estos mensajes fueron reenviados el miércoles sobre todo por personas del PSOE de Andalucía para que los simpatizantes hagan sus ingresos. Por error se le envió el número de cuenta en el Banco Popular incluso a la líder de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, que publicó el mensaje en Twitter.
Ferraz emprende esta iniciativa varias semanas después de que tanto el equipo de López como el de Sánchez hayan iniciado dos campañas de crowdfunding para obtener fondos. La candidatura del ex secretario general ya ha recaudado más de 80.000 euros. La Gestora quiere, según explicó ayer en una nota, que «las aportaciones recibidas cumplan con la normativa relativa a la financiación de partidos políticos».
Para ello, propone abrir dos cuentas corrientes a cada uno de los aspirantes con titularidad compartida entre el PSOE y otra persona designada por cada candidatura.
La candidatura de Sánchez no acogió nada bien la iniciativa, aunque se reservan su postura definitiva hasta la reunión de la próxima semana. La de Patxi López, sin embargo, aceptó en una nota todos los puntos exigidos por Ferraz.
Fuentes de los sanchistas denunciaron que lo que pretende la Gestora es «controlar todos nuestros movimientos sin que nosotros podamos controlar los de Susana Díaz». Además, recordaron que esta instrucción comunicada por carta está «al margen del reglamento de primarias» y podría incluso no ser legal. Por todo ello, ayer pidieron un informe jurídico al respecto.
El procedimiento establecido, denunciaron, no tiene «ninguna transparencia frente a terceros», como aseguró a este diario una persona de la máxima confianza de Sánchez.
Fuentes de la Gestora se mostraron ayer inflexibles y aseguraron que su propuesta no es negociable y que tiene que ser aceptada por todas las candidaturas, ya que es la forma de cumplir la Ley de Partidos, que desde su última reforma regula también los procesos de elección de órganos internos.
Si las posturas siguen igual de enfrentadas, la Gestora que dirigen el presidente de Asturias, Javier Fernández, y el portavoz de Susana Díaz en el Parlamento de Andalucía, Mario Jiménez, va camino de la confrontación total con Sánchez.