EL MUNDO – 17/02/16
· El Constitucional admite a trámite el recurso que presentó el Gobierno.
El pleno del Tribunal Constitucional añadió ayer a última hora un nuevo punto en su orden del día: el recurso del Gobierno contra los artículos del decreto que regulan la atribuciones de la Consejería catalana de Asuntos Exteriores, a cuyo frente está Raül Romeva, el cabeza de lista de Junts pel Sí en las elecciones autonómicas del pasado 27 de septiembre.
El Alto Tribunal decidió admitir a trámite el recurso del Ejecutivo, lo que supone la suspensión automática de las funciones encomendadas a este departamento durante cinco meses. El Constitucional deberá resolver en ese tiempo –que puede ser prorrogado si es necesario– sobre el fondo del recurso presentado por el Gobierno contra las atribuciones de uno de los proyectos estrella del nuevo Govern de Carles Puigdemont.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, anunció la interposición del recurso en el Consejo de Ministros del pasado 22 de enero. La impugnación se dirige contra los artículos que otorgan competencias al nuevo departamento en política exterior, área que sólo puede desarrollar el Gobierno de la Nación.
Unas semanas más tarde, el Ejecutivo completó la impugnación anunciando la presentación de un conflicto de competencias con la Generalitat por la creación del Departamento, al entender de nuevo que la política internacional es competencia exclusiva del Estado.
La decisión del Tribunal Constitucional se sumaba ayer al golpe que ya habían recibido por la mañana los planes del Govern, cuando los juristas del Parlament habían comunicado que consideraban que las leyes de Hacienda propia, Seguridad Social y Proceso Constituyente, que Junts pel Sí y la CUP fijan como la clave de bóveda de la ruptura con España, no deberían tramitarse a través de ponencias conjuntas, como prevén los soberanistas
A instancias de los partidos no independentistas, los servicios jurídicos de la Cámara dictaron un duro informe contra la fórmula elegida por Junts pel Sí y la CUP para tratar de implicar a todas las fuerzas políticas en sus planes. El texto desaconseja que se creen ponencias conjuntas porque «si no se produce el consenso de todos los grupos, o como mínimo de su mayoría, se presentan dudas sobre su viabilidad».
El reglamento del Parlament establece que una ponencia debe tener «representación de todos los grupos parlamentarios» y los no independentistas ya han anunciado su intención de no participar en esos trabajos: desde el principio entendían que no era la fórmula adecuada.
La ‘consellera’ de Presidencia, Neus Munté, atribuyó ayer precisamente a la creación de la Consejería de Asuntos Exteriores, encabezada por Raül Romeva, el aumento en un 8 % del número de altos cargos de la Generalitat.
Munté confirmó este incremento del 8% en esta legislatura, pero lo consideró «absolutamente justificado» por la situación en la que se encuentra Cataluña.
«El Govern tiene un departamento más, el de Asuntos Exteriores, que es absolutamente estratégico y justifica este ligero aumento», reflexionó, antes de conocer que el Tribunal Constitucional había suspendido las funciones de la nueva cartera del Govern.
EL MUNDO – 17/02/16