VICTORIA PREGO – EL MUNDO – 31/03/16
· ¿Qué ha cambiado de anteayer a hoy? Ha cambiado la música, que ha pasado de ser percutiente a levemente melódica porque el líder de Podemos ha decidido ponerse el gorro de generoso prohombre renunciando a asumir una vicepresidencia que nadie le ha ofrecido nunca. Pero nada de lo demás puede dar pie al líder socialista para asegurar, como aseguró ayer, que estamos ahora más cerca de la formación de Gobierno.
Veamos: Podemos ha ofrecido no imponer la presencia de Iglesias en el Gobierno, pero sigue reclamando una representación proporcional en el nuevo posible Ejecutivo, lo que quiere decir que él colocaría a sus peones a la vera del presidente socialista, en caso de que éste llegara a serlo. Pero no ha anunciado ninguna modificación en sus planteamientos económicos, laborales o constitucionales y ha asegurado además que su reclamación de un referéndum de autodeterminación para Cataluña «sigue ahí».
Referéndum que, hay que recordar, es reclamado por Podemos para el País Vasco y por En Marea, sus socios gallegos, para Galicia. La única novedad que ha aportado Iglesias en su comparecencia de ayer ante la prensa es puramente formal: además de la vicepresidencia de quita y pon, acepta que el equipo de C’s participe junto con los socialistas en la mesa de negociaciones. Eso es todo.
Por otra parte, el acuerdo del PSOE con C’s se mantiene e incluso se ha reforzado, el propio Sánchez lo repitió ayer. Y añadió que cualquier pacto posible habrá de incluir como irrenunciable ese acuerdo con el partido naranja.
Pero ese acuerdo contiene puntos que son antitéticos con los planteamientos de Podemos en los campos económico, laboral y constitucional, como poco. Si C’s renunciara a defender sus posiciones en esos puntos para hacer hueco a los planteamientos de Podemos, estaría firmando su sentencia de muerte con fecha fija en las próximas elecciones que se celebraran, además de vaciarse ideológicamente en favor de un partido que sigue siendo de extrema izquierda por más que se vista de vez en cuando de seda.
Es muy improbable que Rivera esté dispuesto a cometer lo que sería el mayor error de su vida política. El mayor y el último, porque moriría en el intento. Y, por lo visto hasta ahora, no parece que los de C’s vayan a morder ese anzuelo. Villegas dejó ayer bien sentado que no van a apoyar «ni por activa (votando sí) ni por pasiva (absteniéndose) un Gobierno de populistas e independentistas».
No se vislumbra por tanto cuáles pueden ser los acercamientos que hagan posible el sueño de Sánchez: formar Gobierno con C’s y Podemos al mismo tiempo. O si eso no pudiera ser, que va a ser que no, contar con el apoyo de ambos en una nueva sesión de investidura.
Así que el paisaje sigue siendo exactamente el mismo que la semana pasada.
VICTORIA PREGO – EL MUNDO – 31/03/16